Hace una semana, en el Centro Peres para la Paz, los líderes que representan a las sectas religiosas de todo Israel se sentaron juntos a hablar contra el racismo y la violencia que actualmente se extendieron en esta nación. Ellos predicaron la paz y la aceptación, y desearon a nuestros amigos musulmanes un año nuevo feliz y pacífico. A pesar de ser todas religiones diferentes, con diferentes puntos de vista, todos estuvieron de acuerdo que la violencia no es la respuesta y que sólo se ensancha la brecha entre judíos y musulmanes.
En su discurso de apertura, Shimon Peres, ex Presidente de Israel, expresó: “Debemos orar juntos y decir con voz fuerte que no hay D-os que no sancione el asesinato. Hay que sentarse y hablar. La violencia no es el camino”.
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Estos líderes visitaron el Centro Peres para la Paz no sólo para hablar de los recientes acontecimientos trágicos, sino también para expresar su gratitud al ex presidente Shimon Peres por dedicar su vida a la paz. Hablaron desde el corazón, compartiendo su dolor y tristeza por quienes fallecieron en esta turbulenta época. Los líderes expresaron sus puntos de vista, haciéndose eco del mismo sentimiento, a pesar de sus diferentes orígenes. El Rabino judío, Shlomo Amar y el Sheik musulmán , Hamad Kivon, compartieron mensajes por la paz.
El Rabino Shlomo Amar, ex Gran Rabino y actual rabino en Jefe de Jerusalén dijo: “No hay religión en el mundo que permita el derramamiento de sangre. El mandamiento ‘no matarás’ está vivo e indiscutible”.
Sheik Hamad Kivon, Presidente de la Asociación de Clérigos Musulmanes declaró: “La santidad de la humanidad está por encima de todos. Está prohibido para cualquiera tomar la ley en sus propias manos y sacar los cuchillos “.
Al final de la conferencia, los representantes de todas las religiones rezaron juntos y cantaron “Ose Shalom Bimromav” (El que hace la paz en las alturas).
