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Sus hijas y su madre reclamaron, el jueves, la incompetencia de la Justicia penal ordinaria porque se habría tratado de un homicidio especialmente vinculado a la denuncia que acababa de presentar contra la Presidenta, el canciller y otros por encubrimiento de los imputados iraníes del atentado a la AMIA y horas antes de su presentación ante el Congreso.

AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO

Las querellas que representan a las hijas y la madre del fallecido fiscal a cargo de la investigación del atentado a la AMIA, Alberto Nisman pidieron la incompetencia de la Justicia penal ordinaria y que la causa que investiga su muerte pase al fuero federal porque se habría tratado de un homicidio vinculado a su condición de procurador, especialmente a la denuncia que acababa de presentar contra la Presidenta, el canciller y otros por encubrimiento de los imputados iraníes por ese ataque terrorista.

El deceso se produjo horas antes de su presentación ante el Congreso para defender su acusación.

Entre las supuestas evidencias de un asesinato se encontrarían el hecho que había sido amenazado, su oposición al polémico Memorándum de Entendimiento con Irán paralelo a su actuación, la “alteración de pruebas” en su departamento para “engañar a los investigadores”, la total falta de motivos para un suicidio y de residuos de pólvora en sus manos, la “manipulación” de su teléfono y computadora y los peritajes de los expertos de parte, que discrepan con los oficiales.

Paralelamente, Juan Pablo Vigliero, letrado de sus hijas, expuso sobre su misterioso fallecimiento en una charla pública organizada por la Universidad de Harvard, en los Estados Unidos.

Y días atrás volvió a declarar en la causa Soledad Castro, secretaria de confianza y una de las últimas personas que vio con vida a Nisman, en una escandalosa audiencia porque los querellantes y la propia testigo se enfrentaron varias veces con la fiscal Viviana Fein y su secretario, Bernardo Chirichella, a quienes acusaron de pretender torcer la investigación.

Contó que el sábado 17 de enero el fiscal le anunció que la necesitaría al mediodía siguiente para cerrar su presentación ante el Congreso, que estaba de muy buen ánimo y que le había encomendado tareas para el resto de la semana.

Chirichella le dijo que eso no tenía mucho que ver con la causa de su muerte y Pablo Lanusse, abogado de la madre de Nisman, lo acusó de no querer investigar la hipótesis de que ella se debió a su denuncia contra la Presidenta.

Su testimonio continuará el miércoles próximo.

 

Fuente: prensajudia.com