ISRAEL – La comunidad hebrea marroquí acelera su marcha a Israel tras las amenazas del Estado Islámico

Rabino peregrinación judía de Asien, cerca de Uezán, norte de Marruecos
Un rabino saluda durante la peregrinación judía de Asien, cerca de Uezán, en el norte de Marruecos (ABDELHAK SENNA – AFP)

AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Cada vez son más los judíos marroquíes que abandonan su país de origen para instalarse en Israel. En 2014 fueron un total de 729 las personas de esta minoría que realizaron su aliyá frente a los 297 del año anterior. Un incremento muy considerable, mayor incluso que el producido tras los atentados de 2003, que tuvieron como objetivo a la comunidad hebrea asentada en Marruecos desde hace siglos.

Los judíos marroquíes se sienten cada día más amenazados. “Matadlos donde los encontréis”. Un vídeo yihadista de once minutos aparecido el pasado mes de octubre en internet, de origen desconocido pero factura similar a los producidos por el Estado Islámico, animaba a los musulmanes a “cortar las cabezas de quienes les matan en Palestina y estrangular a quienes les apoyan”. Las amenazas están dirigidas a la comunidad judía de Marruecos, ya que en las imágenes se sucede la presencia de responsables judíos marroquíes (como el poderoso consejero real André Azoulay, impulsor de la Fundación Tres Culturas, con sede en Sevilla), de romerías y fiestas judías celebradas en varias localidades de Marruecos o de activistas bereberes que mantienen buenas relaciones con los hebreos.

La extensión de este vídeo ha creado la alarma en una comunidad judía que durante muchos años fue la más numerosa del norte de África, y que siempre mantuvo una ejemplar convivencia y colaboración con la mayoría musulmana.

No hay un solo político marroquí que reniegue de la aportación que los judíos han prestado al desarrollo cultural y económico de Marruecos a lo largo de varios siglos de convivencia mutua. Incluso el primer ministro, el islamista Abdelila Benkiran, presidió en el 2013 la reapertura de una sinagoga restaurada en la ciudad de Fez.

No faltan, sin embargo, políticos exaltados que elaboran listas de marroquíes a los que ponen en su punto de mira por mantener relaciones con Israel, aunque en la mayor parte de las ocasiones se trate de deportistas que han competido en el Estado hebreo, o de cineastas que se han desplazado hasta allí para entrevistar a ancianos judíos marroquíes emigrados en Israel.

Salomon Hadad, un anciano judío residente en Tánger, señala que “gente violenta y sin escrúpulos la hay en todas partes, pero en general la convivencia sigue siendo excelente”.

Pero si a mediados del siglo pasado los judíos marroquíes representaban casi un tercio del total de la población, hoy se calcula que apenas sobrepasan los 2.500 integrantes, la mayoría de ellos congregados en la ciudad de
Casablanca. De las más de doscientas sinagogas que jalonaban el territorio, hoy apenas quedan en pie una treintena. En Rabat,
que es la capital administrativa, de las veinte sinagogas que existían únicamente una atiende
a los ochenta judíos que aún viven allí.

Gran parte de la comunidad judía se instaló en Marruecos tras la expulsión de España dictada por los Reyes Católicos. Los sefardíes mantuvieron viva su lengua y su cultura, aunque el paso del tiempo les llevó a una mezcla con las características árabes y musulmanas. En Tánger, los escasos judíos que permanecen en la ciudad mantienen un dialecto mezcla de castellano antiguo con algo de hebreo y de árabe.

En 1948, fecha de la creación del Estado de Israel, se produjo la primera gran emigración de judíos marroquíes hacia el nuevo Estado. Desde ese año y hasta 1956 emigraron unos 90.000 de los 270.000 judíos que habitaban en Marruecos. La inmensa mayoría de los que llevaron a cabo la aliyá (emigración hacia Israel) eran judíos pobres a los que se abrían nuevas posibilidades en la Tierra Prometida.

Otros 120.000 abandonaron el país por temor a lo que pudiera acontecer tras la muerte del primer rey, Mohamed V, del que guardan un buen recuerdo. La guerra de los Seis Días de 1967 culminó el proceso de gran emigración hacia Israel, con otros 40.000 emigrantes que partieron hacia Israel. Aquellos días de junio de 1967 fueron los únicos en los que se produjeron desórdenes, ataques en la prensa y el asesinato de algunas personas.


Fuente: La Vanguardia / Adolfo S. Ruiz

Edita: Silvia Schnessel para Enlace Judío México

https://www.enlacejudio.com/2015/12/23/israel-aliya-desde-marruecos/

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