Tras el ataque del 12 de junio al club Pulse en Orlando, Florida, que dejó 49 muertos y 53 heridos, dos diarios islamistas paquistaníes en urdu –Roznama Islam y Roznama Ummat– publicaron editoriales que culpan a agencias de inteligencia estadounidenses y al “lobby judío/sionista” en Estados Unidos de orquestar el ataque pepetrado por Omar Mateen, un estadounidense de origen afgano.

ENLACE JUDÍO MÉXICO -A continuación reproducimos extractos de ambas editoriales:

Roznama Islam 

Ninguna religión en el mundo condona la masacre de civiles inocentes. El asesinato de inocentes es terrorismo, sin importar quién lo haga o dónde. Sin embargo, es pertinente detenerse y analizar el incidente. Estados Unidos tiene un enorme presupuesto para la defensa y la conservación de la paz. A pesar de esto, en una ciudad estadounidense y en público, un hombre armado ataca un lugar público. Esto pone en duda la capacidad y las medidas de defensa de Estados Unidos.

No es descabellado pensar que la mano de las agencias secretas estadounidenses esté detrás del incidente de Orlando porque ha habido otros incidentes en que han estado involucradas. No es imposible que hayan provocado a un joven musulmán para dar un paso contra la cultura local, es decir, la comunidad LGBT y subsecuentemente culpar a los musulmanes y así fortalecer la atmósfera de islamofobia en Estados Unidos.

Hay que ver este incidente en contexto de las elecciones proximas de Estados Unidos. En este momento, la carrera por la presidencia incluye a un candidato pro-sionista, extremadamente prejuicioso y extremista, Donald Trump, cuyo discurso agresivo e inflamatorio contra el Islam y los musulmanes ha dividido a toda la sociedad estadounidense. Si este incidente beneficia a Donald Trump, esto satisface los anhelos y esfuerzos del lobby judío en Estados Unidos.

Roznama Ummat:

Al momento del ataque, unos 300 homosexuales estaban presentes en el club. Varios aspectos del ataque se han hecho públicos; primero que nada, este ataque no se perpetró contra personas inocentes, sino contra gente involucrada en actividades muy inmorales. Tales personas, los homosexuales, se burlaron del profeta Lut, y como resultado, dios les arrojó piedras desde el cielo. En este contexto, era inevitable el castigo de una u otra forma contra la depravación de la sociedad estadounidense. Es más correcto describir el ataque como un castigo divino que como un acto de odio y terrorismo de Omar Mateen.

A pesar de ser la superpotencia mundial, Estados Unidos no puede salvar a su propia nación y gente. Sin duda, Omar Mateen era musulmán de origen afgano, pero por nacimiento, y legalmente, era ciudadano estadounidense. Agencias de investigación estadounidenses lo habian investigado y declarado que no era culpable. Dos días antes del ataque compró dos armas y se supone que informó a agencias de seguridad de su conexión con ISIS, pero no fue vigilado, lo cual abre muchas interrogantes.

Las agencias secretas estadounidenses han orquestado la mayoría de los ataques terroristas que se han perpetrado en Estados Unidos. Por ejemplo, el año pasado se reveló que una bomba colocada en un espacio de oración judío en Miami, Florida fue colocada ahí por un musulmán a instancias de un empleado del FBI vestido de civil.

Por último, no se pudo encontrar evidencia contra Omar Mateen, así que están haciendo todos los esfuerzos posibles para ligarlo con el Estado Islámico.

Fuente: memri.org