Para finalizar el seminario “Ciudadanía, Exilio y Poder de Memoria” que se llevó a cabo desde el 21 al 23 de junio, la tarde del último día se realizó la clausura con un debate.

ELENA BIALOSTOCKY PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO- En él estuvieron presentes el Lic. Francisco Acosta, Integrante del Centro de Documentación e Investigación de la Comunidad Judía, el Lic. Luis Felipe Estrada Carreón, Profesor y Coordinador de Investigación en UNAM FES Acatlán y Enrique Chmelnik Lubinsky, Director del CDICM.

 FRAGMENTO DE LA PONENCIA “LOS ASQUENAZIS DE ESPAÑA DURANTE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA 1937- 1938”, DE FRANCISCO ACOSTA

“Los judíos de España durante el periódico Bombin ¿Qué hace el idish en España? ¿Acaso no es el Sefaradí el idioma de los judíos de España? Para responder a estas preguntas hay que remontarnos a los años 30, época de la segunda república de España. Primo de Rivera en 1924 concedió la nacionalidad y carta de naturaleza a todos los individuos de origen español, incluyendo a los judíos, acontecimiento importante para las judíos sefaradíes, ya que después de más de trescientos años, esta comunidad regresó a España. Esto permitió la entrada a socialista y anarquistas que durante su estancia favorecieron a la izquierda española. La primera oleada de judíos llegó principalmente de Francia para establecerse en Madrid y Barcelona; sin embargo ya había cierta cantidad de judíos en la península Ibérica, había llegado durante la Primera Guerra Mundial. Con el objeto de seguir la tradición judía se construyó una sinagoga en Barcelona con la ayuda del gobierno.

Haim Avi comentó: “La sinagoga se inauguró en una ceremonia a la que asistieron el alcalde y el gobernador de Barcelona”

Por 1930 habían en Barcelona más de tres mil personal, la mayoría de origen polaco con ideología bundista (unión de corte socialista) se caracterizaba principalmente por la lucha de clases.

Los grupos de izquierda organizaron más tarde una contra olimpiada en protesta por las
Olimpiadas que se realizaban en Berlín; la sede sería en Barcelona, los atletas serían catalanes, judíos y de izquierda. Existía un gran temor por que hubiera un enfrentamiento entre los judíos sionistas y bundistas, sus ideologías eran opuestas.

Las Olimpiadas iniciarían el 19 de julio, mas el 17 de julio Franco se levantó en armas. Entre los deportistas nos encontramos a muchos obreros de muchas ciudades y muchos judíos que iban a tomar parte en las olimpiadas, Entre ellos tenemos a Manuel Bing, último comandante de la división Bombin, quien escribió en sus memorias: ‘En Barcelona nos encontramos con deportistas obreros de muchos países, entre ellos a muchos judíos también de Palestina, poco antes de la inauguración nos sorprendió el golpe militar de Franco. Por las grandes avenidas de Barcelona veíamos carteles que llamaban a los obreros a las armas. Junto con un amigo húngaro, nos presentaron el 21 de junio en una oficina de la Unión Soviética; explicamos a los funcionarios de la embajada que nosotros los atletas y obreros queríamos combatir a los fascistas, recibimos un cartel que nos nombraba soldados de la milicia soviética´.

 

FRAGMENTO DE “EXILIO Y CIUDADANÍA DE ESPAÑOLES Y JUDÍOS EN LA PRENSA MEXICANA” DE LUIS FELIPE ESTRADA CARREÓN, FES ACATLÁN

“Surge una noticia en diciembre de 1935 en el Periódico el Yunque, de Pachuca, pro fundamentalista, en su página cinco tiene un artículo que dice quÉ es el Fascismo, comienza diciendo “Las condiciones ideológicas del mundo actual están determinadas por dos ideologías el fascismo y el socialismo científico. Evidentemente hay muchas más pero carecen de importancia” Esta declaración aparentemente simplista e ingenua de alguna manera sintetizaría los planteamientos que la prensa mexicana y el gobierno cardenista van de forma incondicional con la condición política internacional que se vive. Más allá si está equivocado o no, de este artículo del Yunque lo que nos debe interesar es que este acto de escritura en contexto general es el periódico. Una respuesta a las situaciones en un momento determinado.

No es sólo un acto simbólico en el que las personas en lugar de actuar o establecer una conducta física, deciden hacerlo simbólicamente a través de la escritura. Implica una estrategia y un estilo. No solo se actúa sobre la situación, sino que se actúa de determinada manera y con determinada intención. En este sentido, si está equivocado o no, el artículo no es lo más relevante en el periódico, sino lo que nos dice sobre la estrategia empleada por el diario ante determinada situación. Es la revelación de una actitud hacia esa situación.

En la época cardenista esta batalla de papel plantea de una manera simplista el
enfrentamiento entre el fascismo y el comunismo. Cada una de las tradiciones ideológicas se valoran de una manera, de acuerdo con el sector al que nos referiremos. Por un lado la llamada prensa independiente cardenista estaba dominada por un temor fundado en la reforma política que estaba llevando a cabo el Presidente Lázaro Cárdenas, los conflictos políticos derivados de la estructura de Plutarco Elías Calles y el corolario de este temor se lleva a cabo con la expropiación petrolera. Todo esta va a marcar en las clases medias, empresariales e industriales de México les da la sensación de que Cárdenas los iba a llevar al comunismo.

Mientras que en algunos sectores obreros, sindicatos y campesinos, que poco apoco van
formando parte de una manera cada vez más corporativa del poder político cardenista, da la sensación que “por fin la Revolución nos hará justicia”.

La reacción de los conservadores y la derecha fascista se opone a los beneficios que el cardenismo está llevando a cabo. Estas dos visiones se van a reflejar en las páginas de los periódicos, cargadas de un valor ideológico. Las descalificaciones de un grupo y de otro se dan todos los días.

Lo interesante no es determinar la falsedad o la verdad de las declaraciones de la prensa de su momento, lo interesante sería saber qué condiciones políticas, sociales y económicas producen este acto simbólico de representación y de actitud de los periódicos. También es verdad que los periódicos no general opinión. ¿Por qué? Lo que nos ha mostrado la historia de los periódicos es que la prensa es leída por aquellos que están convencidos de sus ideas. Con esta idea, podemos recordar una frase que dice: “Los periódico se leen como se habla, con los ojos vendados”.

Clausura del Seminario “Ciudadanía, Exilio y Poder de Memoria”

FRAGMENTO DE “MÉXICO EN LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL: REFUGIO, MIGRACIÓN Y EXILIO” DE ENRIQUE CHMELNIK LUBINSKY

“Me voy a enfocar a dos temas concernientes a México durante la Segunda Guerra Mundial: La política doméstica en torno a migrantes y refugiados y la política exterior analizada a la luz de la información. Comencemos entendiendo la situación de México en la época de la Segunda Guerra Mundial, era una época en la que el país se encontraba en circunstancias únicas; para entender las circunstancias tenemos que retroceder al final de la Revolución, como saben la revolución dejó un saldo aproximado de un millón de víctimas. Entonces, era el diez por ciento de la población.

A este contexto demográfico que vamos a situar entre los años 20´s y 30´s hay que agregar que México estaba emergiendo como estado moderno. Fue la combinación lo que
impulsa en su momento al gobierno mexicano a abrir las puertas a la emigración, de manera que México comienza a recibir una cantidad importante con fines de contribuir tanto al crecimiento demográfico como al desarrollo del país.

Esta política de puertas abiertas confirió a México la reputación de ser una especie de gran albergue para refugiados, así que miles de personas de diferentes países comenzaron a imigrar. Esta tendencia no sólo se limitó a los años treinta, en los cuarenta muchos norteamericanos, como el caso de varias personas acusadas de espionaje en favor de la Unión Soviética, como cineastas, escritores políticos o afiliados a movimientos comunistas y un número significativo de voluntarios los que pelearon en la guerra civil española.

Durante la Segunda Guerra Mundial las políticas migratorias para los refugiados estuvieron lejos de ser favorables. De hecho durante una buena parte de ésta época la política de inmigración se hizo a base de cuotas que favoreció a aquellas personas que se ajustaban a un régimen del gobierno mexicano basado en la denominación de culturas asimilables.

En los años 30´s el gobierno mexicano repensó en cuanta gente debería de recibir en aras del desempleo que había con los propios habitantes del país, desempleo provocado supuestamente por los inmigrantes que estaban llegando al país. Estar restricciones se debían también a factores ideológicos, especialmente al propósito de vigilar a los nuevos inmigrantes pudieran asimilarse fácilmente a la cultura mexicana, que compartieran patrones semejantes a los mexicanos con al fin que la integración pudiera desarrollarse más fácilmente.

El gobierno mexicano desarrolló por primera y única vez en su historia una operación
humanitaria internacional durante varios años que involucró a diplomáticos mexicanos
principalmente en España, Francia y Portugal, a través de la cual salvó la vida de alrededor de veinte mil españoles republicanos que desarrollaron un impulso social, científico y cultural en México.

En contraste con la política hacia los españoles, la política hacia los judíos y otras minorías fue muy restringida, como la mayoría de los países a causa de la crisis económica. De hecho, salvo por los refugiados españoles la política mexicana estableció fuertes obstáculos para la admisión de otros inmigrantes con cuotas anuales dependiendo de su país de origen y prohibiciones categóricas para cierta nacionalidades y grupos, incluyendo los judíos.

La restricción migratoria comenzó realmente en 1933 con el gobierno del Presidente Abelardo Rodríguez y coincidió con la migración de gran cantidad de judíos en los albores del régimen nazi.

Durante la Segunda Guerra Mundial además de los diplomáticos mexicanos que tuvieron la audacia y la creatividad para enfrentar la crisis de los refugiados, México comenzó a despuntar como nación en el escenario Internacional sosteniendo una sólida defensa de ciertos principios concernientes a las leyes internacionales”.