EL 17 de Tamuz y el 9 de Av son fechas de ayuno.

AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO

¿Por qué ayunamos?

En las tres semanas de duelo por la destrucción de Yerushalaim muchos nos preguntamos: ¿Si los ayunos sirven para que D ́s perdone los pecados que llevaron a la destrucción, por qué yo debo ayunar? Yo no estaba vivo en aquel entonces y seguramente no cometí aquellos pecados.

Además, vivimos en un momento histórico en que D ́s, con su infinita misericordia, nos ha regresado a la tierra de nuestros patriarcas, a la tierra de Israel. Yerushalaim ya fue reconstruida, ¿por qué todavia ayunamos?

Para contestar estas importantes inquietudes, leamos con atención lo que dice el Rambam acerca de estos ayunos.

“Hay días que todo Bnei Israel ayuna en ellos a causa de las desgracias que les acontecieron a nuestros padres para poder “despertar” los corazones, abrir los caminos hacia la Teshuva. Y esto servirá como recuerdo de nuestras malas acciones y las de nuestros antepasados que fueran similares a nuestras acciones hoy, hasta que ocasionaron (las acciones) a ellos y a nosotros las mismas desgracias. Y es con el recuerdo de esas cosas, que volvamos a hacer el bien (al prójimo), como fue escrito: “y confesarán su pecado y el pecado de sus padres”.

El estudio de los sucesos pasados que llevaron a la destrucción de Yerushalaim tiene por objetivo darnos las herramientas para un profundo análisis del presente. Según esta filosofía, ya que sufrimos hoy de los mismos males que ocurrieron originalmente en el pasado, el presente y el pasado se mezclan entre sí. Nosotros miramos al pasado de un punto de vista transcendental en relación al tiempo, analizando los factores comunes en nuestra realidad y la pasada.

Esta perspectiva nos une al pasado, haciéndonos ver nuestras vidas, del punto de vista metafísico y humano, como una repetición del pasado, no más que en otro escenário. Cambian las circunstancias, pero no los valores involucrados.

A pesar del increíble desarrollo tecnológico, el ser humano no ha evolucionado en términos de su esencia. Es decir, los mismos dilemas morales y éticos si repiten en diferentes épocas y en diferentes lugares. En este sentido el estudio de la historia tiene el propósito de reflejar nuestra propia realidad en otros personajes y otro escenário, permitiéndonos analizarnos a nosotros mismos de una forma más objetiva.

Conclusión

En el judaísmo no ayunamos como recordación de las desgracias del pasado, no ayunamos por la destrucción del Templo, sino que ayunamos por los motivos que la ocasionaran y que persisten en el presente. Si las mismas tragedias persisten en nuestros días, es señal de que todavía no corregimos nuestra conducta. Los ayunos no son días de luto solamente por lo que ocurrió en el pasado, sino que son símbolo de tristeza por nuestras propias debilidades como pueblo y como personas.

Es por este motivo que ayunamos: para aprender de las históricas lecciones del pasado, cómo vivir el presente y planear nuestro futuro.

Al cumplir con los ayunos en forma cabal y sincera, o sea, como medio de reflexión para el retorno a D ́s y a Sus valores espirituales y éticos, abrigamos la esperanza del cumplimento de la profecía:

“Se convertirán estos días de luto y tristeza en días de alegría”
“Todo el que se apena por la destrucción del Templo, verá con alegría su construcción”

 

 

Fuente:centrokehila.org