Un grupo de turistas alemanes llevaron a cabo un ‘flashmob’ en el que disparaban pistolas de juguete en Platja d’Aro (Gerona).

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En una época marcada por el terror yihadista, hay bromas que pueden resultar muy caras. La última tuvo lugar ayer cuando un grupo de turistas alemanes llevaron a cabo un ‘flashmob’ en el que disparaban pistolas de juguete en la zona del paseo Marítimo de Platja d’Aro (Gerona), mientras eran grabados por cámaras de vídeo del teléfono, lo que generó confusión y múltiples rumores sobre un falso ataque.

El incidente provocó  el pánico entre los veraneantes en la localidad costera, en un día repleto de gente en la zona. Los Mossos d’Esquadra arrestaron a cinco individuos por un presunto delito contra el desorden público como responsables de una broma que desencadenó numerosas situaciones de angustia y un infarto por la falsa interpretación de un atentado terrorista. Los jóvenes pasarán a disposición del juez a lo largo de la mañana de este miércoles.

Hace menos de una semana, dos hombres en aparente estado de embriaguez entraron a un banco de la ciudad francesa de Nantes al grito de «Allah Akbar» (Alá es grande). Según informó el diario Ouest-France, un empleado de la sucursal avisó a la policía y el suceso acabó con su localización y posterior registro de sus hogares para comprobar que ninguno de los dos tenía vínculos yihadistas.

Otra macabra simulación tuvo lugar el pasado 11 de mayo cuando cinco gamberros, de edades comprendidas entre los 15 y los 22 años, desataron el terror al término de una película la semana pasada en el Centro Comercial Loranca de Fuenlabrada. Ocurrió en día del espectador, con una cinta de estreno «Infiltrados en Miami». Eso es lo que hizo esta pandilla. Así, mientras uno de ellos desde el interior de la sala se dirigió corriendo a una de las salidas de emergencia para franquear la entrada a sus cómplices, estos accedieron al interior.

Todos iban encapuchados y al grito de «¡Alá es grande!», comenzaron a lanzar petardos y mochilas al aire causando escenas de pánico entre los atemorizados espectadores que habían acudido a ver una comedia y pensaban que estaban asistiendo a un ataque terrorista en toda regla. Muchos de ellos tuvieron que ser atendidos por los servicios sanitarios. El revuelo en el Centro Comercial fue mayúsculo aunque al final todo se quedó en un gran susto. Finalmente, las pesquisas policiales condujeron a la detención de los cinco jóvenes.

Este tipo de actos también son extrapolables a la red, donde el seguimiento policial de cuentas vinculadas con actividades terroristas cada vez es más intenso. Por ejemplo, hace dos años una adolescente holandesa amenazó en Twitter a la compañía aérea American Airlines con «hacer algo realmente en nombre de Al Qaida». La compañía no tardó en poner el mensaje en conocimiento de la policía de Rotterdam, desencandenando una investigación que acabó con su detención.

La detenida, de 14 años, publicó una serie de tuits disculpándose y explicando que todo se trataba de una simple broma. «Siempre quise ser famosa, pero quería decir famosa como Demi Lovato, no como Osama Bin Laden», justificando además que el tuit era un borrador y que se «envió solo». «No puedo ir a la cárcel por un tuit que se mandó solo».

La Policía Nacional ya ha advertido en redes sociales que la comisión de este tipo de actividades tienen consecuencias.

 

Fuente:abc.es