La Biblioteca Nacional de Israel adquiere una importante colección única de antiguos documentos judíos de Afganistán.

SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – La Biblioteca Nacional de Israel en Jerusalem ha adquirido parte de una colección de manuscritos que van a revolucionar nuestra comprensión sobre la historia y la cultura de la antigua comunidad judía de la legendaria Ruta de la Seda. La nueva colección, compuesta de aproximadamente 250 páginas que datan de principios del siglo XI, constituye la mayor masa de materiales originales de la región antes de la era moderna.

Como complemento de la colección existente en la BNI de 29 páginas de la ampliamente conocida “Genizah afgana”, a causa de la destrucción generalizada durante las conquistas de los mongoles, representa prácticamente la única fuente principal de información sobre esta comunidad judía una vez próspera, así como de la región de las culturas islámica y persa antes de la invasión de los mongoles.

Haftarot
Haftarot (Foto: Biblioteca Nacional de Israel)

Esta adquisición ha sido posible gracias al generoso apoyo de la Fundación William y Haim Davidson y el Fondo Haim y Hanna Salomon.

Parte de la colección proviene del mismo archivo comprimido que el puñado de páginas que ya están en poder de la BNI. Estos textos profundizan en nuestra comprensión de la vida de la familia Abu Netzer de comerciantes judíos del siglo XI, que viven en y alrededor de la ciudad de Bamiyán, un centro comercial, una vez desbordante de animación en la ruta de la seda. Las páginas representan partes de múltiples tratados del Talmud, así como liturgia, la ley judía (Halajá), una crónica histórica, y trozos de la Biblia. Un total de 27 páginas del libro contable encuadernado de un comerciante ofrece una mirada a la realidad económica de una comunidad antigua y escasamente estudiada. La colección está escrita en persa, árabe, arameo y judeo-persa.

Tratado de Shabat
Tratado de Shabat (Foto: Biblioteca Nacional de Israel)

“Este hallazgo es particularmente impresionante en relación con la vida y la cultura de los judíos de esta parte del mundo desde el comienzo del segundo milenio”, explicó el Prof. Ben Hageo Samai, experto de renombre mundial en Judíos del mundo islámico.  Según Ben Samai, la colección es de excepcional importancia, debido a la previa escasez de información de primera mano y pruebas de la vida judía bajo el gobierno dinástico local. Hasta este descubrimiento también se acusaba la falta de material literario básico.

Otra parte de la nueva colección contiene documentos que datan de principios del siglo XIII, la crónica de la cultura islámica más amplia en la víspera de las conquistas de los devastadores mongoles de 1221. Como resultado de la destrucción causada por Genghis Khan y su ejército, casi no tenemos documentación de la cultura y la lengua de la región persa y árabe – hasta ahora. Aunque los eruditos musulmanes posteriores han escrito historias de las dinastías islámicas que reinaron sobre la región, esta singular colección de fuentes primarias puede arrojar luz sobre áreas inexploradas de la investigación incluyendo la economía, la geografía y la historia social y política.

Textos comprados
Textos comprados (Foto: Biblioteca Nacional de Israel)

Muchos elementos de la colección habían sido parte del archivo del administrador local, y contienen documentación administrativa y fragmentos de obras literarias y religiosas, principalmente en persa. Este material proporciona una visión sin precedentes sobre el funcionamiento de la administración de gobierno local, la política y la legislación en esta vasta región.

Los estudiosos que han tenido oportunidad de examinar el material se han entusiasmado por su importancia.

“Estos documentos enriquecen la colección líder mundial de Judaica escrita e impresa de la BNI, así como su Colección de Islam y Oriente Medio de clase mundial, que incluye exquisitos manuscritos que datan del siglo 9”, dijo el director de la BNI Oren Weinberg. “La Biblioteca Nacional de Israel se enorgullece de poder ampliar sus tenencias de colecciones especiales relativas al Judaísmo, el Islam y el Medio Oriente”.

BNI digitalizará el material y lo pondrá a disposición de la comunidad internacional de académicos y el público en general. Puesto que la colección nunca antes ha estado disponible al público ni la comunidad académica, la riqueza y la importancia de su contenido aún no se han revelado.

La Biblioteca Nacional de Israel agradece a la Fundación William Davidson y el Fondo Haim y Hanna Salomon por su generoso apoyo a esta adquisición.

Fuente: Arutz Sheva – Traducción: Silvia Schnessel – © EnlaceJudíoMéxico