NELLY HUSNY SMEKE

La próxima llegada de Trump a la presidencia norteamericana genera muchas especulaciones. Es un hecho que la interacción de los Estados Unidos en la dinámica de las relaciones internacionales cambiará drásticamente. Sus propuestas de campaña en cuanto a la política exterior y de seguridad nacional garantizan el inherente cambio en el Orden Mundial.

Las propuestas para la política exterior norteamericana del Presidente electo, muestran un claro interés en perpetuar el liderazgo estadounidense en el ajedrez internacional. Dichas políticas buscan recuperar el poderío que se ha perdido, basándose en estructuras y lineamientos históricamente republicanos y con una orientación neo conservadora.

Para Trump el eje central de la seguridad y estabilidad, tanto nacional como mundial, es controlar y neutralizar a todos esos actores internacionales, que recientemente han entrado a la jugada de los grandes, causando caos, muertes, destrucción y desestabilidad en el mundo.

Es sumamente vital ajustar y equilibrar la balanza de poder internacional, para poder garantizar la estabilidad y la armonía.

En sus propuestas se puntualizan ciertas estructuras básicas para poder controlar e influir en las dinámicas mundiales. Considera que las amistades, las alianzas estratégicas con ciertos actores claves, serán fundamentales para lograr y garantizar un impecable manejo de la política internacional. Las alianzas estratégicas deben mantenerse con Israel, los Estados Árabes amigos, y la OTAN.

En cuanto a la situación de Medio Oriente, Trump asegura que es necesario mantener y fortalecer la alianza histórica entre América e Israel, pues ésta es determinante e indispensable para lograr estabilidad y paz en la región. El trabajo en conjunto ayudará a vencer y deshacerse de manera rápida y efectiva de los grupos islamistas integristas y extremistas como Hamas e ISIS.

Cree que se le ha otorgado demasiado poder a Irán, por lo que considera inadmisible el pacto nuclear celebrado con este país. También juzga inaceptable la histórica “solución” de dos Estados para la problemática Palestina e Israelí.

Trump propone derrotar y eliminar la ideología radical islamista, de la misma forma en que Estados Unidos venció en la Guerra Fría.

El Presidente electo promoverá la iniciativa en el Congreso para la aprobación de un nuevo presupuesto militar para la reconstrucción total de su armada y ejército, apostando por la inversión en la ciberinteligencia. Una milicia grande y poderosa es vital para mantener el control y el liderazgo internacional.

Paz con la fuerza, la política exterior americana girará en torno a concebir, lograr y mantener un mundo en paz, con menos conflictos y más estable.

Compartir con los aliados inteligencia, información e inteligencia cibernética para debilitar y contrarrestar el reclutamiento y propaganda de los grupos terroristas. Lograr una junta agresiva, una fuerte coalición internacional con operaciones tácticas y militares para destruir al ISIS y cortar sus fondos.

Establecer una comisión sobre el Islam radical para identificar y explicar al público americano, las convicciones y creencias del islam radical, para así, identificar los signos de alarma de radicalización y exponer las redes y organizaciones en la sociedad americana que apoyan y contribuyen a esa radicalización.

Las políticas migratorias ayudarán a alejar y mantener del territorio americano a los terroristas. Propone suspender la inmigración proveniente de los países más volátiles y peligrosos del mundo, con un amplio historial de exportación de terroristas.

Propuesta en cuanto a la defensa y seguridad nacional:

1.- Mayor presupuesto para reconstruir la milicia.
2.- Aumentar la armada a 540,000 soldados activos para ejecutar misiones.
3.- Reconstruir la marina con más barcos.
4.- Lograr en las fuerzas aéreas 1,200 aviones de combate.
5.- Aumentar los cuerpos de la marina a 36 batallones.
6.- Invertir en un verdadero sistema de defensa de misiles para enfrentar amenazas reales modernizando la marina y modernos destroyers para enfrentar posibles amenazas de misiles balísticos provenientes de Corea del Norte, Irán e Irak.
7.- Ejecutar una campaña contra la vulnerabilidad cibernética.
8.- Apostar por la ciberinteligencia.
9.-Ampliar la red cibernética, incluyendo las agencias federales para proteger la información y resguardarla, proteger la infraestructura y crear una ciber defensa y ofensa.
10.- Pagar por la reconstrucción de la defensa nacional, auditando al Pentágono, eliminando pagos incorrectos, reduciendo burocracia, recolectando impuestos que no se han cobrado.