JEREMY SHARON / “En nombre de Dios, nosotros, gente de Tierra Santa y líderes de sus comunidades religiosas estamos reunidos para comprometernos a buscar sin descanso la paz en la Tierra”, declararon los líderes religiosos.

SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – En un momento de extrema tensión religiosa y política entre israelíes y palestinos, un grupo de figuras religiosas líderes de las comunidades judías y musulmanas de la región concluyó una cumbre en España el jueves y emitió una denuncia conjunta de violencia e incitación.

El rabino jefe David Lau y varios otros rabinos israelíes, firmaron la declaración junto con el jeque Raed Badir, un erudito líder islámico legal (Shari’a) y miembro del Consejo Ulama de Palestina; Jeque Hamad Abu Dabes – Jefe de la Rama Sur del Movimiento Islámico en Israel; Dr. Maher Khuder – un juez de la corte islámica en Gaza, y profesor de Estudios Islámicos; y el jeque Imad Falouji, uno de los fundadores del ala militar Izz A-Din Al-Qassam de Hamas, que ahora es presidente del Centro Adam para el Diálogo de Civilizaciones en Gaza, entre otros.

La reunión y la declaración fueron el resultado de muchos meses de trabajo del ex ministro del gobierno y activista de la convivencia, el rabino Michael Melchior, que también fue signatario del documento y que dirige el Centro Mosaica, una organización de convivencia y la Iniciativa de Paz Religiosa.

El rabino principal de Ramat Gan Yaakov Ariel, el rabino Ratzón Arusi, miembro del Consejo del Rabinato Mayor, y tres clérigos cristianos de alto rango, también fueron firmantes de la declaración.

“En nombre de Dios, nosotros, gente de Tierra Santa y líderes de sus comunidades religiosas estamos reunidos para comprometernos a buscar sin descanso la paz en la Tierra”, declararon los líderes religiosos.

“Hacemos hincapié en que nuestros dos pueblos son responsables de su destino común, que las tres religiones son responsables de crear la existencia pacífica y que nosotros, como líderes religiosos somos responsables de promover una vida de respeto mutuo basada en la justicia y la seguridad, en el espíritu de la Palabra de Dios, tal como la transmiten Sus profetas”.

La declaración se centró en particular en la santidad de la vida y en la negación de la violencia en general, especialmente en el nombre de Dios.

“La violencia que tiene lugar, supuestamente en nombre de Dios, es una profanación de Su nombre, un crimen contra los que son creados a Su imagen, y una degradación de la fe. El medio adecuado para resolver conflictos y desacuerdos es únicamente mediante negociación y deliberación”.

Los líderes pidieron “el cese de la incitación, la tergiversación y la distorsión de la imagen del otro y del prójimo”, y se comprometieron a “educar a las generaciones futuras para que defiendan el respeto mutuo”.

Los clérigos religiosos también pidieron una solución al conflicto palestino-israelí “que reconoce el derecho de los dos pueblos a existir con dignidad”, y pidió a líderes políticos israelíes y palestinos que trabajen hacia una solución.

También se estableció un comité permanente para aplicar la declaración.

El objetivo de la Cumbre era trabajar hacia una situación en la que la religión ya no sea un obstáculo para la paz y la reconciliación. Por lo tanto, los líderes religiosos se comprometieron a movilizar a los miles de estudiantes y jóvenes que los siguen para hacer lo mismo.

Los otros líderes religiosos signatarios de la declaración son el Dr. Izzat Jaradat – Secretario General de la Conferencia Mundial Musulmana para Jerusalem de la Unión de Estados Islámicos; Prof. Fakher Abu Awad – ex miembro del Consejo Shura de Hamas y un investigador del Islam político; el Dr. Mahmoud al-Habash, jefe del sistema de justicia religiosa de la Autoridad Palestina; el arzobispo de Melchite George Bakuni; el obispo latino de Jerusalem William Shomali; el obispo luterano Munib Younan; y el Metropolitano Greco-Ortodoxo Timotheos Margaritis.

La Cumbre fue iniciada y organizada por el Centro Adam para el Diálogo de Civilizaciones y la Iniciativa de Paz Religiosa Mosaica y fue acogida por el gobierno español.

Los muchos meses de trabajo de preparación de la cumbre exigieron numerosas reuniones a puerta cerrada, con el fin de crear confianza entre los distintos líderes, dijo Melchior al Jerusalem Post.

Melchior dijo que los líderes musulmanes palestinos e israelíes eran figuras religiosas importantes con cientos de miles de seguidores y que representan a numerosos sectores de la sociedad palestina que han respaldado este proceso de reconciliación religiosa.

“Fue muy importante oír a todos los líderes musulmanes decir claramente lo que piensan de la violencia y la incitación, pero todos tenemos que hablar sobre cómo educar, pero esto sin duda fue de gran importancia”.

Había también otros líderes religiosos palestinos que también habían acordado firmar la declaración pero que no estaban autorizados a viajar por consideraciones de seguridad.

“Este es un primer paso muy importante e histórico”, dijo Melchior. “Obviamente, la primera vez que reúnes a la gente hay escepticismo, pero el hecho de que podamos estar de acuerdo en un texto es un gran logro”.

“Da mucha esperanza al futuro porque esto creará el cambio de paradigma en el que la religión ya no será un obstáculo sino que puede ayudar a hacer la paz”.

Melchior dijo que los anteriores esfuerzos de paz han excluido a la religión del proceso, que dijo que “está condenado al fracaso”, ya que la religión es un aspecto tan importante de la vida de las personas en la región.

“El intento de hacer la paz como un proceso secular fracasó miserablemente, y ahora hay mucha esperanza en lo que sucedió en estos días recientes”.

Fuente: The Jerusalem Post – Traducción Silvia Schnessel – © EnlaceJudíoMéxico