Las sospechas en el principal asunto de corrupción que involucra al primer ministro Benjamín Netanyahu están respaldadas por una grabación de una conversación entre el premier israelí y el empresario Arnon Mozes, propietario del diario Yediot Ahronot sobre beneficios mutuos.

ESTI PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – En el corazón del asunto, llamado Caso 2000, se encuentra un intento de hacer un trato inequívoco entre el empresario y el gobierno – no se trata de maletas llenas de dinero en efectivo a cambio de un monopolio de gas, o de transferencias bancarias a una cuenta secreta a cambio de franquicias en recursos naturales o infraestructura, sino de apoyo del empresario que ayudaría a Netanyahu a permanecer en el cargo a cambio de enormes beneficios financieros.

Incluso si este pacto sólo se realizaba en parte o aún estaba en sus inicios, la mera existencia – y documentación – de las negociaciones exige una investigación criminal inmediata. Cuando el asunto se revele plenamente, los detalles arrojarán luz sobre cómo se toman las decisiones a nivel de gobierno.

Según un informe del canal 2, Mozes tuvo una larga conversación con Netanyahu sobre un acuerdo que tenía como objetivo otorgar importantes beneficios financieros a Yediot Ahronot a cambio de una cobertura más favorable del primer ministro en el periódico, y quizás cerrar Yisrael Hayom, el mayor diario de Israel y el principal competidor de Yediot. Mozes también fue interrogado bajo cautela con respecto a las sospechas.

Yisrael Hayom es propiedad del multimillonario estadounidense Sheldon Adelson, confidente del primer mandatario israelí.

Netanyahu dijo a los ministros del Likud el domingo por la mañana que “ahora que sé de qué se trata esto, puedo decir con confianza: nada saldrá de la investigación porque no hay nada”.

El primer ministro dijo que la investigación es resultado de “una incesante presión inapropiada de elementos en los medios de comunicación sobre las autoridades encargadas de hacer cumplir la ley” y aconsejó a sus “amigos en la oposición no celebrar, porque no hay nada que celebrar”.

Además, Netanyahu está siendo interrogado por aceptar regalos ilegales del magnate de Hollywood, Arnon Milchan durante 7 a 8 años, aunque fuentes cercanas al primer ministro afirman que los regalos no fueron concebidos como soborno. El Canal 10 informó el sábado por la noche que Netanyahu habló tres veces con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry en 2014 para pedirle que resolviera un problema con la visa de trabajo del empresario de Hollywood Arnon Milchan.

La diputada Shelly Yachimovich (Unión Sionista) comentó sobre la investigación en un evento cultural en Tel Aviv el sábado diciendo que el primer ministro pronto tendrá que suspenderse de sus funciones. “Esta es una corrupción abominable,” apuntó.

Fuentes: Ynet, Haaretz

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