En Argentina, el acto en memoria de Alberto Nisman, el fiscal judeo argentino asesinado en el 2015, se llevará a cabo en Plaza de Mayo.

Nisman fue encontrado muerto pocos días después de acusar a la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner de encubrir el papel de Irán en el bombardeo del centro judío AMIA en Buenos Aires, en 1994

Según el diario Clarin, el presidente argentino Mauricio Macri y las principales figuras del Gabinete ya declararon que no irán al acto; sin embargo, el rabino Sergio Bergman, titular de Ambiente, asistirá.

“Tenemos un rol institucional y más allá de las simpatías o de la voluntad de que se resuelva, nuestro lugar es otro”, confirmó a Clarín un importante ministro.

Si la postura mayoritaria se mantiene de aquí al miércoles, marcará una diferencia respecto al año pasado cuando en un acto convocado por la DAIA en Plaza Alemania asistieron la vicepresidenta Gabriela Michetti y el ministro de Educación Esteban Bullrich. El Presidente, en tanto, había aprovechado el primer aniversario para recibir a las hijas del fiscal muerto, Iara y Kala Nisman, en su quinta Los Abrojos.

En la Casa Rosada se negaron a confirmar si el Jefe de Estado volvería a saludar personalmente a las herederas del ex fiscal de la causa AMIA. Tampoco lo descartaron.

En campaña y ya como Presidente, Macri sugirió que creía en la hipótesis del homicidio. “Me cuesta creer que Alberto Nisman se haya suicidado”, repitió en varias oportunidades. El 30 de diciembre, el mandatario celebró la decisión de la sala de Casación que reabrió la denuncia de Nisman contra Cristina Kirchner por encubrir el atentado. “Me cayó bien. Se ha dado un gran paso”, se entusiasmó el mandatario.

El diputado oficialista Waldo Wolff, uno de los organizadores junto al fiscal Ricardo Sáenz, le restó importancia a las presencias o ausencias políticas. “Este acto debe estar por encima de la rosca partidaria. Una muerte con estas características debe ser tratada con respeto”, le dijo a Clarín.