La organización PAAZ, Pastores que Aman y Apoyan a Zión, una institución cristiana latinoamericana, organizó el 26 de enero en el auditorio del Museo Nacional de Antropología la ceremonia en recuerdo a las víctimas del Holocausto.
ELENA BIALOSTOCKY PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO –Al evento asistieron Ariel Hojman, Presidente del Consejo Sionista; Jonathan Peled, Excelentísimo Embajador de Israel en México; Eva Lijtszain, Presidenta de Yad Vashem México; Pastor Gilberto Rocha, Director General del Centro Cristiano Calacoaya; Alegre Smeke, Presidenta de Wizo México y el Pastor Felipe García, Fundador y Director de PAAZ.
En el auditorio había una gran cantidad de personas pertenecientes a Iglesias Evangélicas y miembros de la Comunidad Judía de México.
La ceremonia comenzó con un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas del Holocausto, seguido por la interpretación del Grupo Orquestal Patmos quienes tocaron el Himno Nacional Mexicano y el Himno Israelí.
El Pastor Gilberto Rocha comentó: “Vemos que a principios del siglo XX, lo que parecía avance en ciencia, tecnología, cultura y arte; hacía pensar imposible lo que sucedió después. La propaganda fue cobrando poco a poco fuerza hasta que una buena parte de la población europea comenzó a comportarse como los nazis, asimilando la propaganda antisemita. Vimos hace dos semanas que la ONU nuevamente se volcó en contra del pueblo Judío, queriéndole quitar Jerusalem, que sabemos ancestralmente pertenece al pueblo judío”.
Durante las exposiciones se recordó a los seis millones de judíos asesinados durante el Holocausto, mas los millones de personas que murieron bajo la maquinaria nazi por sus diferencias ideológicas, políticas, sexuales o discapacidades de cualquier tipo.
Lo ponentes hablaron sobre la importancia de estos homenajes que recuerdan a las víctimas para que la memoria no se borre. Cada año hay menos sobrevivientes, los que estamos presentes tenemos la obligación de hacer hincapié en la juventud para que no se olvide y no se repita esta época tan obscura de la Humanidad, “NUNCA JAMÁS”.
