YONI BEN MENACHEM

En un par de días se espera que una delegación de seguridad de Hamas llegue a Egipto para reunirse con altos funcionarios de inteligencia en cuestiones concernientes a la seguridad de la frontera con Gaza. Los funcionarios egipcios están exigiendo la extradición de 20 fugitivos vinculados con actividades terroristas en Egipto y con organizaciones como ISIS y la Hermandad Musulmana.

Hamas ha aceptado, en principio, entregar a las personas buscadas a Egipto si se prueba que dañaron la seguridad nacional egipcia.

Egipto, por su parte, aceptó medidas que alivian significativamente el bloqueo a Gaza, lideradas por la apertura del cruce de Rafah.

Esta visita de una delegación de alto nivel de Hamas a Egipto es una consecuencia directa de abrir una nueva página en las relaciones entre Hamas y Egipto por primera vez desde que Mohammed Morsi fue expulsado del poder en julio del 2013.

Ahora está claro que el nuevo acuerdo de seguridad egipcio con Hamas se propone ayudar a Egipto a batallar con el ISIS en el norte de Sinaí. Este contacto directo es un resultado de remodelación de la inteligencia egipcia.

Abdel Fattah al-Sisi ha aceptado pagar “compensación” a Hamas y remover al General Wael al-Safati quien está a cargo de “Palestina” para la inteligencia egipcia.

Un decreto presidencial emitido por el presidente egipcio “pasó a retiro” al General al-Safati junto con otros 18 altos funcionarios egipcios de inteligencia “en concordancia con su solicitud.”

El General al-Safati causó problemas a Hamas y a la organización le preocupaba que continuara creando nuevas tensiones entre el liderazgo egipcio y Hamas. Hace dos semanas, Ismail Haniyeh, un líder prominente de Hamas, y el Dr. Moussa Abu Marzouk, presidente adjunto del buró político de Hamas, visitaron Egipto y se reunieron con funcionarios de la inteligencia egipcia.

Ellos se quejaron por el estado de las relaciones entre el General al-Safati y Hamas.

Como parte del nuevo acuerdo de seguridad con Hamas, el presidente egipcio al-Sisi acordó pasar a retiro de su posición al General al-Safati.

El nombre del General al-Safati ha sido publicado extensamente en el mundo árabe el año pasado después que una conversación grabada entre él y Muhammad Dahlan, un opositor principal del Presidente Mahmoud Abbas de la AP, fue filtrada a un canal de televisión en Turquía, en la que al-Safati criticó duramente a Abbas, Fatah, y el FPLP.

El Presidente Sisi aceptó ceder en el servicio del General al-Safadi a fin de quitar cualquier excusa de Hamas a las demandas de seguridad de los egipcios.

Los egipcios esperan que Hamas se “enderece” rápidamente con las nuevas políticas egipcias con respecto a Gaza y se desconecten por completo de las actividades terroristas de ISIS y la “Hermandad Musulmana” en Egipto.

Pero uno tiene que mirar más ampliamente la purga de las fuerzas de inteligencia egipcias.

Una posición de puerta giratoria

Esta es la tercera vez en dos años que el presidente egipcio al-Sisi hizo cambios significativos dentro de las filas de la inteligencia egipcia a fin de reforzar los mecanismos de control estatales y nombrar a funcionarios encargados.

Al-Sisi está muy familiarizado con el sistema de inteligencia egipcio; él fue jefe de inteligencia militar antes de que el Presidente Mohammed Morsi lo nombrara Ministro de Defensa.

En julio del 2016, el Presidente Sisi pasó a retiro a 17 altos funcionarios de la inteligencia egipcia debido a su oposición al acuerdo entre Egipto y Arabia Saudita con respecto a la transferencia de soberanía de las islas de Tiran y Sanafir a Arabia Saudita.

El Presidente Sisi tiene intención de asumir el control completo del Servicio General de Inteligencia y librarlo de sus opositores. Dirigiendo actualmente el servicio de inteligencia, establecido por el Presidente Gamal Abdel Nasser en 1952, está el General Khalid Fawzi.

Al-Sisi ha nombrado a su hijo mayor Mahmoud para estar a cargo de la seguridad interna en Egipto; él es considerado un “hombre fuerte” en las agencias de inteligencia egipcias y asiste a todas las reuniones formales de su padre.

La “Hermandad Musulmana” es definida como una organización terrorista en Egipto y es considerada la amenaza principal para el gobierno del Presidente Sisi, así que la capacidad de controlar por completo el aparato de la Inteligencia General egipcia es de máxima importancia.

 

 

Fuente: Jerusalem Center for Public Affairs
Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México