RYAN MAURO

Un alto funcionario de la Hermandad Musulmana en Sudán dijo a un medio árabe que el liderazgo internacional del grupo había lanzado una importante campaña de relaciones públicas para influir en los medios de comunicación de Estados Unidos y en los miembros del Congreso e impedir la designación del grupo como una organización terrorista extranjera.

El funcionario supone que el grupo no será señalado por la Administración de Trump y que el Acta de Designación Terrorista de la Hermandad Musulmana introducida en el Congreso fracasaría.

Asimismo, afirmó que su organización se había contactado con funcionarios gubernamentales y miembros del Congreso y los había convencido de que la Hermandad se oponía al terrorismo, a pesar de que el Departamento de Estado norteamericano designara a Hamas – la rama palestina del grupo – como una organización terrorista extranjera.

El autor del artículo informa que, según fuentes de la Hermandad, el grupo ha gastado $ 5 millones en la campaña de relaciones públicas, con contratos firmados el mes pasado. Individuos cercanos a Hillary Clinton contactaron a los funcionarios de la Hermandad con empresas de relaciones públicas.

El esfuerzo para influir en los medios de comunicación estadounidenses incluye la publicación de artículos y ensayos donde se discute la designación de la Hermandad.

De hecho, una serie de artículos que defienden al grupo fueron publicados tras los informes de que la Administración de Trump planeaba la designación. La mayoría de ellos alegan que la organización se opone al terrorismo y a la violencia. Como afirmé en diciembre de 2014, esta noción es totalmente falsa.

La Hermandad también agradeció a los líderes de Turquía y Qatar por apoyar a la organización. Egipto, los Emiratos Árabes Unidos, Bahrein y Arabia Saudita han designado a la Hermandad como un grupo terrorista.

El gobierno egipcio advirtió que la organización tiene un lobby en Estados Unidos disfrazado de organizaciones de la sociedad civil. Un sitio web del gobierno egipcio citó un estudio realizado por un grupo de expertos en El Cairo afirmando que la Hermandad está tratando de influir en la política estadounidense a través de afiliados en Estados Unidos con el objetivo de “difundir las ideologías extremistas de la Hermandad Musulmana en EE.UU,” según el sitio web.

Un alto funcionario de los Emiratos Árabes Unidos afirmó que el lobby estadounidense de la Hermandad era responsable del retroceso político en torno a la designación anterior de grupo y de dos entidades con sede en Estados Unidos, el Consejo de Relaciones Americano Islámicas (CAIR) y la Sociedad Americana Musulmana (MAS).

La asignación de fondos para esta campaña es un reconocimiento indirecto de la Hermandad en Estados Unidos, y su actividad en el país es significativa. Si una persona afirma que la Hermandad tiene una rama americana se le acusa de ser un fanático “islamófobo”, pero la noción no es tan polémica en la prensa árabe (a pesar de que la Hermandad insinúa lo mismo).

Actualmente, las actividades de influencia extranjera están en la cima de las noticias en Estados Unidos, pero se centran en Rusia. ¿Por qué se puede decir que Rusia intenta influir en la política estadounidense, pero es intolerante sugerir lo mismo con respecto a la Hermandad Musulmana – el mayor movimiento islamista del mundo?

Fuente: The Clarion Project / Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico