El reconocido jurista de la Universidad de Harvard, Alan Dershowitz, denuncia vinculaciones de la Asociación Internacional de Abogados Democráticos con el terrorismo iraní y palestino. Dicha asociación opera, entre otras instituciones financieras, con La Caixa.

ACOM

Ciertas instituciones financieras en Estados Unidos y España están en la pugna por proporcionar cuentas a la Asociación Internacional de Abogados Democráticos, que promueve un boicot a Israel y defiende el programa nuclear de Irán.

Alan Dershowitz, en declaraciones al Jerusalem Post: “La organización (IADL) fue fundada como un frente comunista y apoyada económicamente por la Unión Soviética. Es antidemocrática en su esencia, y apoya el terrorismo y la represión. Ninguna persona o institución decente debe estar relacionada o apoyar su agenda y acciones antidemocráticas”.

La AIID declara en su web que “apoya el movimiento de boicot, desinversión y sanciones para boicotear productos israelíes, así como las empresas que apoyan a la ocupación, y para sancionar a Israel por sus crímenes”.

El propio sitio web de la IADL solicita donaciones y listas de cuentas con Comerica Bank en Michigan y La Caixa.

Wayne Mielke, un portavoz de la sede de Comerica en Dallas, dijo al Jerusalem Post: “Comerica Bank, como todas las demás instituciones financieras en los Estados Unidos, está legalmente obligada a proteger la privacidad de sus clientes. Por lo tanto, no discutimos las relaciones de los clientes con terceros”. Agregó: “Por favor, sepa que tenemos un programa de cumplimiento robusto en el banco para asegurar que los clientes que operan con nosotros tienen derecho legalmente a tener una cuenta bancaria”.

El gobernador de Texas, Greg Abbott, pidió a principios de febrero una legislación que penalizara a las compañías que boicotean a Israel. “Ningún dinero de impuestos de Texas debe apoyar a las compañías que boicotean a Israel, uno de los mayores aliados de nuestra nación, en nombre de la corrección política o en la búsqueda de programas políticos erróneos”, dijo.

El gobernador de Michigan Rick Snyder firmó una ley anti-BDS en enero.

Angel Mas, presidente de ACOM (Acción y Comunicación sobre Oriente Medio), una organización española pro-israelí, dijo al periódico: “El movimiento BDS en España ha sido objeto de graves golpes judiciales y políticos durante los últimos meses, demostrando que las campañas de odio pueden ser detenidas. Las instituciones financieras tienen la obligación legal y moral de operar con la diligencia debida hacia sus clientes. Todos los grupos del BDS, incluidos aquellos que se disfrazan de legítimas asociaciones pro-derechos humanos, tienen en última instancia una agenda antisemita y discriminatoria que justifica la violencia, y los bancos que los apoyan deben dejar inmediatamente de prestar servicios para sus actividades ilegales”.

El sitio web de la IADL tiene al menos tres páginas dedicadas a la crítica de Israel. Durante la Operación Pilar de Defensa de la FDI para detener el lanzamiento de cohetes de Hamas en 2012, IADL escribió que “condena la agresión israelí ilegal en Gaza”.

Jan Fermon, el secretario general de la IADL, pareció respaldar la conferencia internacional de Irán el martes pasado en apoyo de la Intifada palestina en Teherán, a la que asistieron grupos terroristas designados por Estados Unidos y la Unión Europea: Hamas, Hezbollah y Jihad Islámica.

Fermon dijo el martes al New York Times: “Incluso bajo el derecho internacional, los palestinos, ocupados, tienen derecho a luchar. El líder supremo de Irán, Ayatollah Khamenei, en su discurso en la conferencia, prometió su apoyo a los grupos que hacen la guerra contra Israel. Llamó al Estado judío “un tumor canceroso”. La IADL ha defendido el programa nuclear de Teherán, diciendo que el gobierno de Irán “desea desarrollar su investigación de la materia nuclear para uso pacífico. Tal uso es obviamente el derecho más básico para cada país”.

Gerald Steinberg, director de NGO Monitor, con sede en Jerusalén, dijo al Post: “La IADL, que se describe como “progresista”, es miembro de la red de ONG´s que dirige las campañas de demonización dirigidas a Israel. Al igual que otros grupos de ese tipo, utilizan afirmaciones pseudo-legales para negar a Israel el derecho a defender a su población del terror. Sus socios han incluido el PCHR (Centro Palestino para los Derechos Humanos9, una ONG con base en Gaza y presuntos vínculos con la organización terrorista del FPLP, según lo documentado por NGO Monitor”.

 

 

 

Fuente:acom