TONY BADRAN

Medios de comunicación libaneses informaron el martes que el magnate y financista del terrorismo Qassem Tajeddin ha sido arrestado en Marruecos antes de abordar un vuelo a Beirut.

El Departamento del Tesoro de EEUU designó a Tajeddin en el 2009 como “un importante contribuyente financiero” de Hezbolá y por operar un número de empresas fachada con sus hermanos para el grupo.

Los detalles del arresto siguen siendo escasos. Citando fuentes anónimas “cercanas a la familia,” los medios noticiosos libaneses dijeron que las autoridades marroquíes arrestaron a Tajeddin en el aeropuerto de Casablanca y lo llevaron a un lugar desconocido. En una declaración, la familia Tajeddin admitió que él estaba en custodia marroquí.

La familia buscó también disipar “rumores” sobre el incidente – probablemente una referencia a informes que el arresto llegó por pedido de los servicios de inteligencia de EEUU, quienes luego arrestaron a Tajeddin. Otros medios incluso especularon sobre un posible ángulo israelí. Hasta el momento, nadie ha acusado a Arabia Saudita de colusión, aún cuando los vínculos entre Rabat y Riad son fuertes.

Tajeddin, también ciudadano de Sierra Leona, maneja un gran imperio empresarial con sus hermanos a lo largo de Africa Occidental y tiene tratos cercanos con Hezbolá. Sus dos hermanos menores, Ali y Hussain, están ambos bajo sanciones de Estados Unidos. Ahmad, tecer hermano de Tajeddin, es ahora el accionista mayoritario de Congo Futur, compañía de aserraderos, al que el Tesoro sancionó en el 2010. A pesar de la sanción, un informe reciente por parte del grupo anti-corrupción Global Witness reveló que Congo Futur ha seguido exportando madera a EEUU. Un informe del Wall Street Journal en noviembre reveló también que los productores de alimentos de EEUU estaban todavía trabajando con empresas de aves de corral controladas por los Tajeddin.

Mientras tanto, el negocio de Qassem Tajeddin sigue activo en Líbano. Sus proyectos comerciales y residenciales sustanciales no sólo son lucrativos sino ayudan también en la planificación militar de Hezbolá. Las propiedades de Tajeddin se encuentran en territorio sensible a lo largo de Líbano, especialmente en el distrito Chouf al sur de Beirut, en el distrito adyacente de Bekaa Occidental, y en la carretera costera que vincula Beirut con el sur de Líbano.

Algunos libaneses temen que estos proyectos permitan a Hezbolá presentar nuevas realidades demográficas en áreas no chiíes, mientras aseguran el acceso de la organización con propósitos militares. Ellos también temen que algunos de los proyectos más grandes puedan incluso tener instalaciones subterráneas que podría usar Hezbolá.

Aunque los órganos de medios de Hezbolah se han mantenido callados acerca del tema, el miércoles, el alcalde de la ciudad natal de Tajeddin amenazó con manifestaciones afuera de las embajadas marroquí y estadounidense si Tajeddin no es liberado al cabo de 48 horas. Las tensiones entre el “eje chií”, liderado por Irán, y Marruecos aumentarán probablemente si él permanece en custodia marroquí.

El arresto de Tajeddin fue una medida bienvenida en la lucha global contra las finanzas de Hezbolá, pero es algo que Irán y Hezbolá ven indudablemente como una provocación – aún más si Marruecos lo extradita a los Estados Unidos.

Fuente: Informe Político de la Fundación para la Defensa de las Democracias/ Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México/ Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico