La abogada dice que el sospechoso, arrestado en Ashkelon, tiene tumor cerebral no maligno que conduce a problemas de comportamiento; el Fiscal General de Estados Unidos aprueba el arresto

Un adolescente israelí-estadounidense sospechoso de estar detrás de decenas de amenazas de bomba contra centros comunitarios judíos en Estados Unidos es detenido en una cárcel el jueves por orden de un tribunal israelí, horas después de que intentara agarrar la pistola de un oficial durante su detención.

El arresto del hombre de 19 años fue anunciado por la policía de Israel el jueves, después de una investigación encubierta de meses de duración por parte de la unidad cibernética Lahav 433 y el FBI, según la policía de Israel.

La policía dijo que el sospechoso intentó agarrar el arma de una agente mientras lo arrestaban. La oficial logró mantener el control del arma, dijo la policía.

No se ha dado a conocer el nombre del sospechoso y los detalles sobre él o su posible motivación han sido escasos.

Su abogada, Galit Besh, dijo que el adolescente tiene un tumor cerebral no maligno que conduce a problemas de comportamiento y que recibía educación en el hogar.

Su prisión fue prorrogada por el tribunal de Rishon Lezion durante ocho días. Se enfrenta a cargos de extorsión y se le acusa de sembrar miedo generalizado y pánico, dijo la policía.

El portavoz de la policía, Micky Rosenfeld, dijo que el sospechoso supuestamente realizó docenas de llamadas telefónicas amenazantes a lugares públicos, sinagogas y edificios comunitarios en Estados Unidos, Nueva Zelanda y Australia. También hizo una amenaza a Delta Airlines, causando que un vuelo en febrero de 2015 hiciera un aterrizaje de emergencia.

El Centro Comunitario Judío de Albany, cerrado brevemente debido a una de las amenazas de bomba, 18 de enero de 2017. (Captura de pantalla de Twitter a través de JTA)

“Es la persona que estaba detrás de las amenazas del JCC”, dijo Rosenfeld, refiriéndose a las decenas de amenazas anónimas llamadas a los centros comunitarios judíos en los EE.UU. en los últimos dos meses.

La policía confirmó que el sospechoso tiene doble ciudadanía estadounidense e israelí. Se lo eximió del servicio obligatorio de las FDI por considerarlo no apto para el servicio militar, según el diario Haaretz.

Un vecino le dijo a Channel 10 News que era muy tranquilo y que sólo salía de su casa a caminar con un perro, siempre con la misma ropa.

El arresto fue la culminación de una investigación internacional a gran escala sobre las amenazas de bomba, dijo el fiscal general estadounidense, Jeff Sessions.

“El Departamento de Justicia está comprometido a proteger los derechos civiles de todos los estadounidenses, y no toleraremos que ninguna comunidad en este país sea tomada como objetivo en base a sus creencias religiosas”, dijo en un comunicado.

Casi 150 amenazas de bomba han azotado a los Centros Comunitarios Judíos, JCC (por sus siglas en inglés), escuelas judías diurnas y otras instituciones judías desde comienzo de año, provocando la evacuación de docenas de centros comunitarios judíos. Las amenazas han llegado en su mayor parte en olas, vía teléfono y correo electrónico. Muchas de las instituciones han sido amenazadas más de una vez.

Dos jóvenes se detienen a ver la actividad de la policía fuera del Museo de los Niños Judíos después de una amenaza de bomba, el jueves 9 de marzo de 2017 en la ciudad de Brooklyn de Nueva York. (AP / Bebeto Matthews)

Yaniv Azani, jefe de tecnología de la unidad cibernética de la policía israelí, dijo que el sospechoso usó “varios medios diferentes para camuflar las diversas capas de mecanismos de comunicación” a fin de llevar a cabo las llamadas.

Nimrod Vax, cofundador de la firma estadounidense de seguridad cibernética BigID, dijo que las llamadas requerían un cierto nivel de sofisticación, pero que “no eran demasiado difíciles” para un hacker experimentado.

El rastreo del sospechoso habría necesitado recursos significativos y órdenes judiciales para obtener y peinar paneles de registros electrónicos.

El ministro de Seguridad Pública, Gilad Erdan, dijo en una declaración que “esperamos que esta investigación ayude a arrojar luz sobre algunas de las recientes amenazas contra las instituciones judías, que han causado gran preocupación entre las comunidades judías y el gobierno israelí.

Dos hombres jóvenes paran para ver la actividad de la policía fuera del Museo de los Niños Judíos después de una amenaza de bomba, el jueves 9 de marzo de 2017 en la ciudad de Brooklyn de Nueva York. (AP / Bebeto Matthews)

Rosenfeld dijo que el hombre usó tecnologías avanzadas para enmascarar el origen de sus llamadas y comunicaciones a sinagogas, edificios comunitarios y lugares públicos. La policía registró su casa el jueves por la mañana y descubrió antenas y equipos de satélite.

“Él no usaba líneas de teléfono regulares. Utilizaba diferentes sistemas informáticos para que no se lo pudiera rastrear”, dijo Rosenfeld.

Jordan Shenker, jefe del JCC de Kaplen en el Palisades en Tenafly, dice que es cautelosamente optimista de que el hombre arrestado en Israel el jueves actuara solo y que las amenazas hayan terminado.

Shenker dice que el arresto permite una sensación de alivio, pero que el centro siempre ha priorizado la seguridad y continuará haciéndolo.

Las amenazas a las instituciones judías han sido investigadas por el FBI, el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias policiales.

Juan Thompson, residente de San Luis, ha sido acusado de cometer ocho de las amenazas, pero parece que ha sido un imitador.

A principios de este mes, un alto funcionario de la policía de Nueva York dijo que la mayoría de las amenazas eran realizadas por un solo individuo usando tecnología de falsificación telefónica para enmascarar la fuente de las llamadas.

Fuente: The Times of Israel – Traducción: Silvia Schnessel –  Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico