Para la administración Trump, un presidente turco fortalecido podría facilitar el plan para expulsar al Estado Islámico de Raqqa

Emre Peker y Laurence Norman / Enlace Judío –  Recep Tayyip Erdogan en el referendo del domingo podría allanar el camino a la cooperación pragmática con Estados Unidos mientras lo coloca en un curso de colisión con Europa, dijeron funcionarios. El domingo por la noche, Erdogan declaró su victoria, mientras que la oposición prometió desafiar los resultados. Los votantes aprobaron por un margen estrecho enmiendas constitucionales que expandirán vastamente el poder de Erdogan, dándole licencia para transformar políticamente a un miembro de la Organización del Atlántico Norte en el que Estados Unidos y Europa han llegado a confiar como un socio en la lucha contra el Estado Islámico, la guerra siria e intentos por torcer el flujo de migrantes del Medio Oriente a la Unión Europea. La Casa Blanca se negó a comentar el domingo sobre los resultados del referendo.

Un representante del Departamento de Estado dijo que estaban siguiendo el resultado de la votación del referendo pero se abstendrían de comentar hasta que hayan sido confirmados los resultados y también esperarían las conclusiones iniciales de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa, la que ha estado observando el referendo. Entre las primeras medidas del Sr. Erdogan el domingo a la noche estuvo decir que buscaría reinstalar la pena de muerte, la que Turquía desechó como condición para iniciar conversaciones de adhesión a la Unión Europea. La canciller alemana Angela Merkel ha dicho que tal medida no es “de ninguna manera compatible” con la pertenencia a la Unión Europea. Otros funcionarios han dicho que eso significaría el fin inmediato de las conversaciones de adhesión.

Pero el domingo al atardecer, la reacción europea a la votación fue cauta. En una declaración, el presidente de la Unión Europea, Jean-Claude Juncker, y otros dos altos funcionarios dijeron que habían tomado nota de los resultados informados en Turquía pero esperarían la evaluación de los monitores internacionales sobre la votación incluyendo sobre “presuntas irregularidades.”

Funcionarios turcos dijeron antes de la votación que no habría ningún cambio abrupto en la política exterior de Ankara. “En las relaciones con la OTAN y Estados Unidos no habrá definitivamente ningún cambio. El poder regional y posición de Turquía con sus aliados es claro,” dijo Reha Denemec, un asesor principal del Sr. Erdogan. Para la administración Trump, un Sr. Erdogan fortalecido podría significar asegurar un acuerdo sobre un plan para expulsar al Estado Islámico de Raqqa en Siria, la capital de facto del grupo yihadista extremista. Estados Unidos ha dependido de las fuerzas kurdas sirias que Turquía considera terroristas para combatir al Estado Islámico, avivando las tensiones entre los aliados de la OTAN, pero la victoria de su referendo podría dar al Sr. Erdogan latitud para ser más  flexible, dijeron los funcionarios estadounidenses. El curso de las relaciones con la Unión Europea se ve más complicado.

Un repique constante de crítica de Bruselas y los gobiernos de la Unión Europea por los presuntos abusos de derechos humanos de Turquía y la erosión del imperio del derecho regularmente tensa las relaciones, y las tensiones podrían acumularse a medida que el Sr. Erdogan consolida poder. “Nuestra preocupación es que Erdogan sólo se apresurará e… irá hacia lo que es básicamente un gobierno de un sólo hombre,” dijo un diplomático occidental. “No lo endulcemos.” Antes del referendo, el Sr. Erdogan acusó a la Unión Europea de intromisión en los asuntos internos de Turquía y abogó por reinstalar la pena capital.    En los últimos meses, el Sr. Erdogan ha criticado duramente al Occidente por su lenta respuesta al golpe militar de julio pasado y amenazó repetidamente con hacer jirones un acuerdo migratorio con Europa que ha ayudado a erradicar el flujo de refugiados sirios dentro del bloque. Ankara está airada porque más de un año después del acuerdo, la Unión Europea no ha proporcionado viajes libres de visa a Europa para los nacionales turcos ni ha acelerado las conversaciones de acceso de Turquía para unirse a la Unión Europea. Los funcionarios europeos dicen que ambas medidas dependen de las reformas políticas en casa.

Frustrado por lo que ve como falta de sinceridad y dilación europeas, el Sr. Erdogan ha llamado a un plebiscito sobre si continuar con las conversaciones de membresía con Bruselas.  “Veo el referendo actual como un referendo sobre el acceso a la Unión Europea, porque un país con tal constitución nunca podría unirse a la Unión Europea”, dijo Kati Piri, miembro holandés del Parlamento Europeo que maneja las relaciones con Turquía. —Josh Zumbrun en Washington contribuyó con este artículo.

Fuente: The Wall Street Journal- Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México