Enlace Judío México- Muchos judíos de vena laborista creen que Corbyn tiene tendencias antisemitas, no obstante, no se apuran en invertir su voto a favor de los conservadores ya que chocan de frente con los ideales de esta facción política. “Estaban acostumbrados a un ambiente político de gran influencia, pero con Corbyn no tienen eso”, asegura un investigador especializado en judíos británicos.
Cuando los activistas laboristas van de puerta en puerta con la intención de reclutar votantes a favor de su causa y se topan con una mezuzá, saben que tienen que cambiar la estrategia de convencimiento, ya que a pesar de que vivimos en una era digital en la que se pueden llevar a cabo campañas dirigidas a través de las redes sociales y otras plataformas, estas campañas aún dependen en gran medida de proselitismo a la antigua.
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“Lo escuchas una y otra vez cuando conversas con los votantes judíos”, asegura un activista del Partido Laborista, “dicen que siempre y cuando Corbyn sea el líder nunca van a votar por el Partido Laborista, y cuando les confieso que yo también soy judío me preguntan si no me avergüenza representarlo”.
A pesar de que de unease semanas a la fecha Corbyn ha logrado mejorar su imagine y de disminuir el otrora amplio margen que separaba al Partido Laborista de su contraparte conservadora, Jeremy sigue siendo una figura controvertida. Esto es doblemente cierto para la mayoría de los votantes judíos quienes creen que los comentarios antisemitas han incrementado dentro del partido desde que Corbyn fue elegido para liderarlo hace dos años. Tienen una muy mala opinión de Corbyn debido a sus políticas en lo que respecta a Israel y, especialmente, por haber acogido a negacionistas del Holocausto y a miembros de organizaciones terroristas como es el caso de Hamás y Hezbolá.
Sin embargo parece que una fracción significativa de los judíos británicos está considerando votar por el Partido Laborista este jueves. Como con cualquier tema político relacionado con la comunidad judía, ésta se encuentra dividida en tribus cuyas razones para votar por el Partido Laborista varían ampliamente.
De un lado del espectro político se encuentran los judíos que apoyan a Corbyn; algunos de ellos -miembros de grupos de izquierda radical y comunistas- no habían depositado sus votos en el Partido Laborista en elecciones pasadas en las que los líderes del partido consistían de nuevos políticos de tendencias centristas. Hay un número de judíos pro-Corbyn que ha sido determinante para el movimiento Momentum: una organización establecida al margen del Partido Laborista en 2015 específicamente para apoyar a Corbyn y sus políticas. Entre ellos se encuentra Jon Lansman, el fundador de Momentum y el arquitecto de la campaña de Jeremy Corbyn en 2015. Este grupo ha estado involucrado a lo largo de los últimos dos años en intensas conversaciones dentro de la comunidad judía en su intento por convencer a los judíos británicos de que no hay motivos para temerle a Corbyn. Otro grupo de judíos que apoyan a Corbyn son los miembros de movimientos pro palestinos y antisionistas británicos. Estos grupos que han estado operando durante mucho tiempo a los márgenes de la comunidad judía establecida, excluidos del mainstream, ven en Corbyn a un defensor de sus puntos de vista y han trabajado apasionadamente para promover sus causas. Uno de ellos, Jonathan Rosenhead, presidente del Comité Británico para las Universidades de Palestina quien ha abogado a favor del boicot de académicos israelíes, expresó esta semana en su columna de opinión en Haaretz que como judío británico aplaude la idea de que Jeremy Corbyn sea el próximo Primer Ministro.
