Oficiales de las FDI dicen que la fuerza de las Naciones Unidas en el sur de Líbano no está haciendo su trabajo por temor a enfrentar a Hezbolá

El subdirector general de Israel, el mayor general Aviv Kochavi, y el comandante de la fuerza de paz de la ONU en el sur del Líbano, entraron en una acalorada discusión mientras daban un paseo por la tensa frontera con la embajadora estadounidense Nikki Haley el jueves.

Según un reportaje del canal 2 el domingo, Haley fue informada por el comandante de la UNIFIL (Fuerza Provisional de Naciones Unidas para el Líbano, por sus siglas en inglés), general Michael Beary, quien le dijo que la situación en la frontera era estable y que no necesitaba más intervención.

Kochavi interrumpió a Beary, quien le dijo a Haley que la FPNUL no estaba haciendo bien su trabajo y se cuidaba de entrar en las aldeas y ciudades del sur del Líbano y enfrentarse al grupo terrorista de Hezbolá.

Kochavi pidió a Haley que ayude a cambiar el mandato de la fuerza internacional para facilitar el desarme de Hezbolá, dijo el informe.

Un diplomático más tarde se disculpó con Haley por el estallido, pero según se informó ella dijo que era bueno ver la realidad del lado israelí y que eso influiría en su trabajo en el organismo mundial, donde ha sido una firme partidaria de Israel.

La FPNUL (Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano) es una fuerza internacional creada por el Consejo de Seguridad en marzo de 1978 para mantener la frontera entre Israel y el Líbano. Desde la Segunda Guerra del Líbano de 2006, la fuerza también se ha encargado de vigilar el cese de las hostilidades entre los dos países, apoyar a las tropas libanesas desplegadas en el sur del país y garantizar el acceso humanitario a los civiles de la región.

La fuerza de 15.000 miembros de la ONU también está encargada de garantizar el “cese inmediato” de los ataques de Hezbolá, y de asegurar “el cese inmediato por Israel de todas las operaciones militares ofensivas”.

Hezbolá ha aumentado considerablemente sus reservas de armas desde la guerra de 2006 y ha mejorado su arsenal a unos 150.000 misiles, dijeron funcionarios israelíes. Israel también teme que hayan llegado a Hezbolá algunas armas avanzadas como armas de superficie a mar o misiles antiaéreos.

La enviada estadounidense visitó el Kibutz Misgav Am, en la frontera norte de Israel con Líbano, donde recibió información de los oficiales de las FDI y de las fuerzas de la FPNUL.

Embajadora de Estados Unidos en la ONU Nikki Haley visita un túnel de terror construido por Hamas en la frontera de Israel con la Franja de Gaza, el 8 de junio de 2017. (Matty Stern / Embajada de los Estados Unidos en Tel Aviv)

Más temprano en el día visitó las comunidades israelíes en las áreas que rodeaban la región fronteriza de Gaza, reuniéndose con los residentes locales y recorriendo uno de los cruces hacia el enclave palestino gobernado por Hamas.

Durante su gira por el sur, Haley visitó a residentes del Kibutz Nahal Oz, inspeccionó un túnel de ataque excavado en Hamas cerca del Kibutz Ein Hashloshá y recorrió el cruce fronterizo de Kerem Shalom, el principal cruce por el cual se transfieren mercancías de Israel a la Franja.

Fuente: The Times of Israel – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico