Enlace Judío México.- Los matones de Erdogan se hacen acreedores a órdenes de arresto de la policía de Columbia por golpear a manifestantes.

THE WALL STREET JOURNAL

Washington tiene suficientes problemas hoy sin tener que sumar los malos hábitos de otras naciones a la cultura política local. De ahí que sea buena noticia que la policía del Distrito de Columbia haya emitido órdenes de arresto para 12 miembros del destacamento de seguridad que trajo el presidente turco Recep Tayyip Erdogan a la capital de la nación el mes pasado.

Creyendo aparentemente que las reglas de Estambul se aplican en cualquier parte, los hombres de seguridad atacaron y golpearon a manifestantes anti-Erdogan frente a la embajada turca sobre la Avenida Massachusetts. Grabaciones los muestran pateando y golpeando a manifestantes en Sheridan Circle. Nueve manifestantes terminaron en el hospital, y dos oficiales del Servicio Secreto de EE.UU. y un policía del Distrito de Columbia fueron heridos en la confusa pelea. Siete de los turcos enfrentan cargos graves por el delito de ataque.

Las órdenes de arresto son simbólicas porque los acusados están de regreso en Turquía, pero envían un mensaje importante. Esto puede ser un día más en el cargo para los matones de Erdogan, pero no es un comportamiento normal en Estados Unidos, donde la protesta pacífica es protegida por la Constitución, y eso incluye protestar contra jefes de estado extranjeros.

Nosotros entendemos las preocupaciones acerca de que gobiernos extranjeros intenten presentar cargos penales contra diplomáticos y personal militar estadounidense mientras se desempeñan en el exterior. La inmunidad diplomática protege a menudo delitos cometidos en Estados Unidos por funcionarios extranjeros. Estados Unidos también tiene importantes intereses de seguridad con Turquía y el hipersensible Erdogan. Pero la policía del Distrito de Columbia tiene razón en usar este incidente para trazar una línea clara. La alfombra de bienvenida de Estados Unidos a los líderes extranjeros no incluye convertir los ataques contra manifestantes por parte de agentes de seguridad en otra de las atracciones turísticas de la ciudad.

 

 

Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México