Enlace Judío México.- Invita a Netanyahu para recordar a los judíos deportados por la Francia de Vichy.

JUAN PEDRO QUIÑONERO

Tras la amarga conmemoración del LXXV aniversario de la redada del Velódromo de Invierno que tuvo lugar la noche del 16 al 17 de julio de 1942, cuando 13,000 judíos parisinos fueron detenidos para ser deportados a campos de concentración nazis, Emmanuel Macron defendió ayer, ante Benjamín Netanyahu, el relanzamiento del diálogo entre israelíes y palestinos «desde la perspectiva de dos Estados, con Jerusalén como capital». Último paso dado por el presidente francés en la hiperactiva diplomacia en la que se ha embarcado desde su llegada al Elíseo.

Emmanuel Macron aprovechó su encuentro con Netanyahu el pasado 1 de julio en Estrasburgo, con motivo del homenaje al fallecido canciller Helmut Kohl, para invitarle a presidir la ceremonia anual en recuerdo de las víctimas de la redada del Velódromo. Tras el acto, Macron sostuvo con su homólogo israelí una reunión de trabajo, en el Elíseo, con el fin de intentar relanzar un diálogo en vía muerta. El mandatario francés no asume completamente el proyecto de su antecesor, François Hollande, de convocar una nueva conferencia de paz, que Netanyahu comenzó por dinamitar verbalmente hace meses.

Colonización ilegal

Macron recibió el pasado día 5 al presidente de la Autoridad palestina, Mahmoud Abás, confirmando entonces que Francia condenaba «una política de colonización ilegal desde el punto de vista del derecho internacional». Once días más tarde, el presidente francés ha mantenido ante Netanyahu el mismo principio, abogando por una solución «con dos Estados, Israel y Palestina, y una sola capital, Jerusalén».

Tras el fracaso de la mediación norteamericana de la primavera de 2014, el diálogo no ha vuelto a reanudarse. Hollande propuso hace poco más de un año la organización, en París, de una nueva conferencia internacional. Prudente, Macron no hace suya tal ambición, limitándose a confirmar la disposición francesa a participar y apoyar los esfuerzos de la comunidad internacional, agregando: «Inicio con Benjamin Netanyahu una relación que, en principio, solo desea sentar nuevos pasos para el diálogo, con un sentido práctico de los calendarios y el tiempo».

En opinión de David Khalfa, investigador asociado en el Instituto para la seguridad de Europa (IPSE), «Macron sabe que debe mostrarse muy prudente si no desea recibir palos de todas partes. No es evidente que el presidente se aventure en el terreno pantanoso de las grandes maniobras diplomáticas internacionales. La nueva posición francesa es de equilibrio, bajo el signo de la eficacia».

Un equilibro que buscó Macron en su primer encuentro de trabajo con su homólogo israelí en terrenos como Irán o la lucha contra el terrorismo. Comprendiendo la inquietud y reservas de Israel hacia el programa nuclear iraní, Macron insistió en que Francia será «vigilante y exigente» ante los acuerdos contraídos con Teherán. La guinda obligada en toda reunión diplomática de alto nivel fue la cooperación anti terrorista entre Francia e Israel, que es y será motivo de una «gran convergencia de puntos de vista».

En una próxima visita de Estado a Israel, el presidente francés profundizará en esos primeros pasos del diálogo de fondo iniciado con Netanyahu, en el marco de «un respeto mutuo por la seguridad y la estabilidad de toda la región».

 

 

Fuente:abc.es