Enlace Judío México – Una prensa de vino de 1600 años de antigüedad que fue descubierta en el Néguev, pudo haber sido utilizada por soldados romanos para la producción del líquido, el cual era muy apreciado en la época si su origen era de esta zona árida de Israel.

Un grupo de arqueólogos de la Autoridad de Antigüedades de Israel excavó una estructura que data del siglo IV después de nuestra era, en cuyo interior se descubrió una prensa de vino, en la región de Ramat Néguev. Todo gracias a un trabajo de mantenimiento que se realizaba en la zona que accidentalmente dejó al descubierto la construcción.

El edificio mide alrededor de 40 por 40 metros, y está hecha a base de piedra cincelada, lo que indicaría que la prensa de vino sirvió para una unidad del ejército romano en la región.

El pozo destinado para el almacenamiento del vino tiene un diámetro de 2.5 metros y una profundidad de 2 metros.

El pozo que servía para el almacenamiento del vino

Se piensa que la producción de esta prensa alcanzaba los 6500 litros de vino.

“En toda la región sur del Néguev, solo hay otra prensa de vino que está dentro de una estructura cerrada, que es la que se localiza en la localidad de Avdat” comenta el arqueólogo Yoram Jaimi.

Junto con el equipo de arqueólogos, también participó un grupo de jóvenes de la yeshivá Belevav Shalem de la localidad cercana de Yerujam, para que se involucraran y se conectara con la historia de su entorno físico.

Los jóvenes que participaron en la excavación.

“El sur del Néguev es conocido como una región cultural que creció viñedos para la producción de vino, el cual se exportaba hasta los confines más lejanos del Imperio Bizantino” comenta la directora de la excavación Tali Gini. Debido a que se producía en una zona árida, era muy apreciado.

Según Gini, la prensa de vino pudo haber dejado de trabajarse en el siglo VI debido a alguna plaga que tuvo como efecto que menos vino se consumiera en la región. A esto se suma la invasión árabe musulmana del siglo VII que trajo a su fin la producción del líquido.

Fuente: The Times of Israel, The Jerusalem Post