Enlace Judío México – El seminario busca que sus participantes descubran la historia del idioma yidish y de la vida judía en Polonia antes del Holocausto y que conozcan la vida judía contemporanea actual, así como que implementen sus habilidades con el idioma.

Durante tres semanas en julio se estudió el idioma yidish, su gramática, se cantaron sus canciones y y se descubrió la historia de los judíos en Polonia en el Seminario Internacional del Idioma y Cultura Yidish, que este año llegó a su edición 15.

El programa es dirigido por Golda Tencer, quien es también directora de la Fundación Shalom y del Teatro Judío de Varsovia. Hace 20 años también fue la fundadora del Centro de Cultura Judía de Varsovia, donde se desarrolló el seminario, y que ha ayudado a transmitir un inmenso legado patrimonial en yidish.

“La nación judía en Polonia murió, pero la cultura y la literatura judías no. Nuestra misión es transmitir este hilo de nuestra judeidad” comenta Tencer.

En las mañanas los participantes estudiaron el idioma yidish, desde el nivel principiante hasta los avanzados, y durante las tardes tomaron conferencias o realizaron caminatas para descubrir la historia judía de la zona.

Una de las participantes fue la actriz polaca Barbara Szeliga, quien ha trabajado por más de 30 años en el Teatro Judío.

“Tenía que aprender el idioma porque yo no sabía que era lo que estaba actuando.

“Aprendíamos yidish desde los libros de texto de escuela del régimen socialista de la posguerra sobre la amistad polaca-soviética” comenta Szeliga.

Otro de los participantes fue Eugen Parnes, quien hoy reside en la ciudad de Malmö en Suecia. Junto con sus padres quien hablaban yidish, abandonó Polonia en 1971 a los 17 años.

“Mucha gente de mi edad no sabe yidish porque sus padres no les hablaban en el idioma, y algunos ni siquiera sabían que tenían raices judías“.

“A pesar de que puedo hablarlo, he olvidado cómo leerlo y cómo escribirlo” comenta Parnes.

Dentro de las actividades que se desarrollaron en el Seminario, era por ejemplo, leer alguna historia directo del yidish de I.L Peretz y luego ir a la calle donde vivía o visitar su tumba en el cementerio judío.

Fuente: The Times of Israel