Enlace Judío México – Debido al nivel de gases de efecto invernadero que el ganado y la industria cárnica producen en China, el gigante asiático busca alternativas como la ‘carne cultivada’, que se produce a través del desarrollo de tejido celular en laboratorios sin dañar a los animales.

China llegó a un acuerdo de 300 millones de dólares para involucrarse en las tecnologías del procesamiento de “carne cultivada” de tres compañías israelíes, SuperMeat, Future Meat Technologies y Meat The Future.

La “carne cultivada” es un desarrollo en laboratorio en la que por medio de células animales se procesa carne comestible, por lo que podría decirse que no ha sido extraída directamente de ningún animal y puede ser edible para aquellos que se abstienen de su consumo.

Con estas modernas tecnologías adquiridas, China busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que se generan por parte del ganado de vacas y otros animales que se mantienen en centros de procesamiento de carne, así como de los fertilizantes y demás químicos que se usan para su alimentación y tratamiento.

Cerca de un 14.5% de las emisiones de gases de efecto invernadero provienen del sector ganadero, un porcentaje incluso más grande del que proviene de las emisiones de automóviles.

Pese a que muchos grupos veganos aún mantienen oposición a este tipo de tecnología, pues el uso de las células fueron extraídas de animales, otros grupos de la misma índole la apoyan y la consideran una buena medida “verde” para poder solventar el problema del sacrificio animal para consumo humano.

Bruce Friedrich, titular del Instituto del Buen Comer, que promueve medidas alternativas y saludables para la alimentación humana, aplaudió el acuerdo y lo llamó “una oportunidad de mercado colosal”.

Fuente: Jewish Press / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico