Enlace Judío México.- La guerra abierta con los musulmanes franceses todavía no estalló, pero los eventos recientes la están acercando.

GIULIO MEOTTI

En 1961, cuando estaba claro que Francia no tenía posibilidades de ganar la guerra en Argelia, florecieron las ideas sobre las particiones de ese país del norte de África. Uno que se consideraba seriamente sugería crear una reserva para blancos y harkis alrededor de la ciudad de Orán, mientras que Argel habría sido, como Berlín, una ciudad dividida en dos partes.

El general de Gaulle finalmente rechazó el plan elaborado por Alain Peyrefitte. Pero sucedió en otro lado. Grecia y Turquía intercambiaron sus poblaciones en 1922 para poner fin a una guerra que duró 100 años y, como resultado, la guerra en Chipre terminó. Sudán cerró el libro sobre su guerra civil al otorgar la independencia al sur del país. Lo mismo sucedió en Irlanda del Norte.

La “Guerra por Francia” apenas está en sus comienzos. Han ocurrido muchos ataques islamistas asesinos y grandes territorios ya están fuera del control de la República secular francesa. Aunque el conflicto todavía está en su ‘infancia’, la noción de “partición” o secesión avanza en la opinión pública. Es por eso que en la revista mensual Causeur, una respetada publicación editada por Elizabeth Levy, un artículo largo simplemente apoyaba la idea de una división de Francia.

Todos se dan cuenta de que en Francia se formó un segundo pueblo, una rama que quiere definir su vida con valores religiosos y se opone fundamentalmente al consenso liberal sobre el que se fundó nuestro país“, escribe Christian de Moliner. “Pero una nación siempre se basa en un pacto fundamental, un mínimo de leyes que todos aprueban. Este ya no es el caso“.

Mientras Francia todavía no está en guerra abierta, los fieles del Profeta ya están agrupados en áreas gobernadas por reglas especiales (velo obligatorio, antisemitismo, vida matrimonial regulada según los principios coránicos). “Por temor a aparecer como ‘islamofóbicos’ y para satisfacer a este creciente grupo de musulmanes, los gobiernos franceses están dispuestos a aceptar la difusión de prácticas radicales en todo el país: el velo en la escuela y en el trabajo, la obligación de carne halal en todas las cantinas“.

No habrá adherencia de todo el país al Islam como en la “Presentación” de Michel Houellebecq, sino simplemente la situación en que una minoría religiosa impone sus reglas en gran parte de él. “La expulsión de los extremistas, elegantemente llamada ‘remigración’, es imposible si mantenemos un marco democrático. Deportar a los descendientes de inmigrantes sería brutal e intolerable, y basta con convencerse para ver el terrible destino de los rohingyas. Una separación total, territorial y política, es imposible. Ninguna nación viable puede formarse a partir de múltiples guetos musulmanes que no tienen unidad geográfica. La única solución que me parece adecuada para las diversas tendencias de la sociedad actual sería un territorio, un gobierno, pero dos pueblos: los franceses con las leyes usuales y los musulmanes con un estatus coránico. Un consejo de ulemas arreglará la ley religiosa, pero la autonomía se detendrá allí. Es obvio que un gobierno embrionario musulmán se está instalando en Francia. La idea traería paz a Francia, rompería los excesos del Islam y preservaría un marco democrático para el 95% de la población“.

La propuesta práctica de De Moliner es claramente utópica, pero el hecho de que en Francia escritores y periodistas estén tratando de imaginar tales soluciones al estado actual del país les da una idea de lo que está sucediendo en París. Está en pánico. Los extremistas musulmanes y los bandidos tomaron el control de muchas zonas francesas prohibidas, los judíos están abandonando sus áreas históricas para reagruparse en otras más seguras, la revista Charlie Hebdo está sufriendo una nueva ola de amenazas de muerte, Emmanuel Macron acaba de regresar de un viaje en Abu Dhabi y Riad donde elogió el Islam y los combatientes extranjeros franceses están regresando a su país de origen después de la derrota de ISIS en Siria.

Todo está volviendo a su lugar correcto. Listo para una futura explosión islamista.

Fuente: Arutz Sheva – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico