Enlace Judío México – Mario Livio es un astrofísico israelí-estadounidense y autor de libros de divulgación científica. En la pasada edición de La Ciudad de las Ideas Beyond X, habló sobre una cualidad que considera la más importante para la civilización moderna: la curiosidad. Tras su ponencia, dio una conferencia de prensa y concedió una entrevista exclusiva para Enlace Judío en la que habló sobre la curiosidad, la guerra, el judaísmo y más.

 

Livio considera a la curiosidad algo muy importante debido a que es algo que impulsa cosas como la investigación científica, la educación, la narración de historias, la escritura, el cine, las mejores obras de arte e incluso la conversación

En los últimos cuatro años, Livio se ha enfocado en la investigación acerca de la curiosidad, tanto a nivel psicológico como en el campo de las neurociencias. La importancia de la curiosidad en la sociedad también fue uno de los temas en los que se enfocó.

“La curiosidad es el mejor remedio para el miedo” señala. “Cuando uno teme algo es porque sabe muy poco acerca de ello o no lo entiende. Pero si uno se vuelve curioso y aprende de ello, el miedo disminuye”.

Un ejemplo es el actual tema de los refugiados alrededor del mundo. Livio considera que hay muchos mandatarios que tratan de hacer que la gente tenga miedo de los refugiados, haciendo creer que son terroristas o criminales. Debido a que la gente no sabe mucho sobre ellos, les temen, por lo que harán mucho menos para solucionar su problema, ayudarlos o tener compasión de ellos. Pero si existiera una curiosidad sobre los refugiados, él cree que la actitud de la gente hacia ellos sería totalmente diferente.

Una parte importante de la cualidad de la curiosidad es genético, alrededor de un 40% o 50%. A pesar de ello, la curiosidad puede ser aumentada, pero la pregunta es ¿cómo lograrlo? Una de las formas es haciendo muchas preguntas, pero sin dar respuestas inmediatas, sino que pasen a través de un proceso de reflexión mediante el cual se generen más preguntas. Otra forma es incluir temas quizá no tan interesantes en una curiosidad que ya exista, como generar la curiosidad sobre la gravedad terrestre en un niño por medio de los dinosaurios, tema sobre el cual ya tienen una curiosidad y que bien conducida, los hará interesarse por la gravedad terrestre.

Todo tipo de curiosidad es para responder ciertas preguntas, pero cualquier pregunta que sea respondida abre nuevos tipos de preguntas más profundas. Siempre hay nuevas preguntas, pero lo que ocurre es que uno impulsa las preguntas de una manera más y más profunda. Nunca uno se quedará sin preguntas, solamente uno se adentrará en cuestiones más profundas.

Existen algunos aspectos de la curiosidad que en principio no son tan buenos. Como por ejemplo, con el tema de la clonación o la intervención del gobierno en conversaciones privadas, temas en los cuales mucha gente no está piensa que sea una buena idea. Hay ciertas reglas éticas que tienen que ser obedecidas y por lo tanto ciertos aspectos potencialmente negativos de la curiosidad que deben de ser controlados. En su libro, Livio abordó los aspectos positivos.

La creatividad no es lo mismo que la curiosidad. La creatividad es cuando se produce un campo totalmente nuevo o se hacen cambios fundamentales a uno ya existente. La curiosidad en sí misma no es aún creatividad. En estudios sobre individuos creativos, se ha logrado localizar que el elemento común en ellos es que fueron muy curiosos. Por lo que resulta que la curiosidad es una condición necesaria, pero no suficiente, para la creatividad. Ser creativo es tener la capacidad de aplicar ideas de una disciplina en otra. Pero para poder lograr eso se requiere haber sido muy curioso.

Existe también cierta correlación entre la inteligencia y la curiosidad. En promedio, la gente más inteligente tiende a ser más curiosa, aunque no llega a ser determinante. Hay muchas diferencias individuales entre las personas, tanto en términos de qué es lo que despierta curiosidad en las personas como en términos de la curiosidad que sienten.

Por el momento, Livio considera que no existen “escalas” para medir la curiosidad. La razón de por qué los niños preguntan mucho los porqués, es debido a la necesidad que sienten de comprender las causas-efectos de las cosas, ya que sienten el deber de acoplarse a su entorno. Pero con la edad, nuestra “curiosidad perceptual”, la habilidad para sorprenderse, va decreciendo y con ello la voluntad de querer tomar riesgos por la innovación. Pero no así con nuestra “curiosidad epistémica”, el querer aprender nuevas cosas, se mantiene constante siempre.

La curiosidad evoluciona debido a la sobrevivencia. La gente trata de entender su entorno para poder sobrevivir, para saber cuáles son las causas y los efectos de las cosas y cómo eso afecta la vida personal. Sin embargo, en los humanos la curiosidad siempre sobrepasó la mera necesidad de la sobrevivencia. Los humanos son la única especie animal que es capaz de preguntarse ¿por qué? incluso de cosas que no se ven.

¿Acaso la información instantánea de la que disponemos hoy gracias a la tecnología está “matando” la curiosidad? Livio considera que no. La investigación científica se enfoca en las preguntas más importantes ante las cuales no se sabe la respuesta por completo, lo que significa que las respuestas a ello no se pueden encontrar en el internet.

La información al alcance de nuestra mano gracias al internet hoy día tiene algo que Livio llama “la curiosidad específica”. La necesidad de una porción de información específica. Ser capaces de poder lograr responder de manera casi instantánea esas “curiosidades específicas” ayuda a volvernos más curiosos. Livio incluso asevera que en su propio campo de trabajo, el internet y la información al alcance de la mano ha logrado aumentar aún más su curiosidad.

El efecto negativo que Livio sí nota respecto a las nuevas tecnologías es sólo respecto a la pérdida de curiosidad de una persona hacia otra debido a los dispositivos móviles, el internet y las redes sociales.

“Al final del día, la curiosidad proviene de dentro de uno mismo, no del exterior” señaló.

 

En la entrevista que concedió a Enlace Judío, Mario Livio habló sobre sus experiencias como científico, como judío y como soldado del ejército israelí.

Enlace Judío: La tradición judía alienta a los niños a realizar preguntas. Dicen que la pregunta es más importante que la respuesta. Pero en la ortodoxia dicen que todo está en el Libro y a pesar de esto hay muchos científicos judíos.

Mario Livio: Cuando dices que los judíos son el “pueblo del Libro”, eso se refiere a la Biblia. Es verdad que a la educación siempre se le otorgó un énfasis en el judaísmo. En parte sirvió como un medio de sobrevivencia, ya que a los judíos no se les permitía hacer muchas cosas, profesiones, etc. No eran particularmente fuertes físicamente o cosas así, y como un medio de sobrevivencia tenían que ser más inteligentes que otros, por lo que le dieron un énfasis a la educación.

En el judaísmo siempre ocurrió el caso de que el rabino, la persona que debía de ser el más educado en la comunidad, era la persona más importante. Por lo que de nuevo, la educación era enfatizada. En ese respecto, sí, ocurre justamente el caso de que si uno voltea a los campos de la literatura o la ciencia, el número de gente con un origen judío sobrepasa el número relativo de la población en general. Creo que eso es parte de esta tradición.

Eso es cierto para todas las religiones y no sólo para el judaísmo. Por ejemplo, en la Edad Media, la iglesia dominó el pensamiento y construyó muros alrededor de ciertos tipos de conocimiento. Básicamente decía, “Ya sabemos todo lo que tiene que ser sabido y no tienen que ser curiosos sobre nada más”. Eso fue parte de la razón por la que la Edad Media duró tanto tiempo. La principal transición a través del Renacimiento y eventualmente por la Ilustración fue el hecho de que la gente ya no pensaba que sabían todo lo que tenía que saberse, sino que se dieron cuenta de que no sabían casi nada y que tenían que aprender de todo.

En la religión judía, tal como en otras religiones, no se fomentaba cierto tipo de curiosidad. Al mismo tiempo, las tradiciones en el Talmud de hecho tenían que ver con mucha curiosidad. Se podían pelear largos ratos por interpretaciones de esto y aquello.

Hoy encuentras científicos de todas las religiones, algunos de ellos ortodoxos. Tengo amigos personales que son judíos muy ortodoxos y que son muy buenos científicos. Aquellos que se vuelven científicos muy buenos, usualmente adoptan un enfoque muy interesante sobre la ciencia y la religión, y dicen cosas como, “Todo lo que vemos a nuestro alrededor es gobernado por las leyes de la física ¿pero quién las determinó?”.

Por supuesto que hay gente que se va hacia el otro extremo y no se vuelven científicos. Solamente creen que todo es tal y como está escrito en la Biblia. Galileo luchó contra ello hace 400 años y ganó.

EJ: Usted escribió un libro llamado ¿Es Dios un matemático?

ML: Sí, pero ese libro no trata sobre Dios. Es de hecho una frase acuñada por un científico llamado James Jeans en el siglo pasado, y lo que significa es cómo la matemática es tan poderosa en términos de que explica todo el universo. Eso es lo que esa pregunta significa.

EJ: ¿Cómo es que transitaste de las supernovas hacia la curiosidad?

ML: Yo siempre fui una persona muy curiosa. Tengo miles de libros de arte, trabajé con la Orquesta Sinfónica de Baltimore con música. Hace como unos 5 años me volví muy curioso sobre la curiosidad misma. Dediqué los últimos 4 años a tratar de leer todos los trabajos importantes sobre la curiosidad, desde la psicología, la neurociencia, etc. Entrevisté a muchos investigadores del área, visité laboratorios, etc. Eso fue lo que al final culminó en el libro sobre la curiosidad.

EJ: ¿Cómo te cambió la guerra?

ML: Cuando uno se da cuenta de lo mala que es la guerra, no quiero decir que yo pensara que era buena, pero cuando ves a gente morir de manera innecesaria, gente que tenía sueños, ambiciones, etc., te da una perspectiva diferente sobre las prioridades, y qué es importante en la vida. Gente que estudió conmigo murió, he visto a otros morir, y sabía exactamente qué quería hacer esta gente y simplemente terminaron muriendo a sus 20 o 30 años.

Tienes un tipo diferente de sentimiento por la importancia de la vida y la importancia de evitar la guerra a cualquier costo. Traté de encontrar la forma de ser curiosos uno con el otro y encontrar una manera de vivir de manera más pacífica en este mundo. Hay que hacer algo mejor por toda la humanidad.

EJ: ¿Es usted optimista?

ML: No puedo decir que los recientes años me hayan hecho muy optimista, pero hemos escuchado que en muchas estadísticas estamos mejor hoy que hace 100 o 500 años. Algunas cosas mejoran de cierta manera. Pero algunas otras no están tan bien.