Enlace Judío México.- Las misivas recogidas por el jefe de la organización judía Michał Weichert en la Segunda Guerra Mundial en Polonia revelan escritos garabateados por carteros polacos en sobres que había enviado a las sucursales de su organización; las inscripciones incluyen ‘El judío ya no existe’ y ‘Los judíos han sido expulsados’; sobres revelados por la Biblioteca Nacional de Jerusalén después de la controversia del proyecto de ley del campo de exterminio polaco.

ITAMAR EICHNER

La Biblioteca Nacional de Israel reveló el lunes una colección de 59 cartas escalofriantes enviadas por el presidente de la organización en Cracovia, Michał Weichert, a las diferentes ramas de una organización judía de asistencia social, sobre la base del polémico proyecto polaco que prohíbe las referencias a “campos de exterminio polacos”.

La organización de Weichert, Yidishe Sotsyale Aleynhilf, que significa “autoayuda social judía”, fue una organización legal que organizó la ayuda para los judíos en los campos y guetos durante la Segunda Guerra Mundial.

Las cartas en cuestión se enviaron por correo entre septiembre de 1940 y mayo de 1941 para tratar de determinar la situación en las comunidades judías de Polonia, pero el servicio postal del país las devolvió al remitente y agregó varios comentarios manuscritos en los sobres, que apuntan hábilmente a la colaboración polaca con el régimen Nazi.

Los sobres de la colección de Weichert

Entre las inscripciones escritas en los sobres por carteros polacos había comentarios como “El judío ya no existe“, “El judío ha dejado la dirección“, “Los judíos han sido expulsados” y “El consejo judío ya no existe“.

Parece razonable suponer, entonces, que los carteros polacos eran muy conscientes de lo que les sucedió a los destinatarios de las cartas cuando los devolvieron al remitente con los comentarios antes mencionados.

Weichert fue sacudido por las cartas devueltas, suponiendo que los comentarios de los carteros insinuaban la aniquilación de toda una comunidad.

Los sobres, algunos de los cuales fueron sellados en polaco con “¡Victoria para los alemanes en todos los frentes!“, fueron tomados por Weichert como prueba de la colaboración de muchos polacos y la identificación inequívoca con los objetivos y acciones de los nazis.

Por lo tanto, el director de la organización decidió guardar las misivas en un escondite, junto con documentación adicional del mismo período. Cuando terminó la guerra, él retiró el material de su escondite y lo agregó a su archivo personal.

Si bien sus archivos fueron transferidos a la Biblioteca Nacional hace unos 50 años, la colección de sobres permaneció en manos de su familia y solo el pasado mes de abril el hijo de Michał, Yosef Weichert, decidió entregarlos a la Biblioteca Nacional también.

Ahora es el momento de depositar estos artículos históricos en sus manos“, dijo el joven Weichert a los funcionarios de la Biblioteca Nacional. “Es importante que el mundo conozca la historia y recuerde y tenga en cuenta que los polacos tomaron parte en las crueles acciones de los alemanes durante el Holocausto, y que todos conozcan sus horrores“.

La organización de autoayuda social judía que Weichert fundó estaba basada en Cracovia y, a partir de mayo de 1940, difundió los fondos recaudados por el Comité de Distribución Conjunta Judío Estadounidense en los Estados Unidos a las comunidades judías de Polonia, con el asentimiento alemán.

Junto a Weichert, la administración de la organización también incluyó a Marek Bieberstein, jefe del Judenrat del gueto de Cracovia. Los vínculos relativamente estrechos de la organización con las autoridades nazis fueron considerados por muchos como deplorables, y al final de la guerra Weichert fue acusado de colaboracionismo.

Las acusaciones hirieron enormemente a Weichert, quien luego dedicó muchos años a limpiar su nombre y probar su inocencia.

Weichert, su esposa y su hijo sobrevivieron al Holocausto, y llegaron a Israel en 1958 con un valioso e invaluable tesoro de documentación excepcionalmente importante para los estudios del Holocausto.

Los sobres de las cartas devueltas a Weichert de las diferentes ramas de la organización que encabezaba eran testimonios irrefutables de los acontecimientos de la época, ya que fueron los correos de Polonia los que notificaron a Weichert sobre las sucesivas comunidades judías diezmadas en toda Polonia.

Las cartas ahora se conservan en la Biblioteca Nacional, donde están disponibles para investigadores e historiadores.

Fuente: Ynetnews – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico