Enlace Judío México – El doctor Daniel Fainstein, Decano de Estudios Judaicos en la Universidad Hebraica de México, dictó la conferencia “Woody Allen: Judíos en el cine y la literatura”, el pasado domingo 21 de enero en la Comunidad Bet-El.

Eduardo Huerta para Enlace Judío México

Antes de hablar de Woody Allen es necesario tener en claro quién fue o quién es Woody Allen, de nombre Allan Stewart Königsberg; quien desde muy joven trabajó escribiendo chistes para periódicos y para cómicos, un adicto al trabajo y que ha ganado el Oscar en distintas categorías, sin embargo siempre mantuvo el margen entre su vida privada y el trabajo.

Woody Allen es uno de los pocos directores independientes que tiene el control de todas las etapas del proceso de creación cinematográfica; muy pocos pueden hacer esto, casi siempre se estudian posibles finales, y demás elementos de la producción.

Woody Allen es el Kohelet (Eclesiastés) del siglo XX.

Kohelet es uno de los libros de la biblia hebrea (Tanaj), Eclesiastés, un libro extraño que forma parte de la literatura sapiencial, en estos libros no aparece D-s, no aparece “D-s le dijo al profeta” sino que todo es experiencia humana, “Experimenté, y vi, y dije…” en la Biblia hay varios libros que forman parte de este tipo de literatura.

Hay muchas coincidencias de la filosofía de Woody Allen, de la visión del mundo de Woody Allen en gran medida (no todas) con una figura muy interesante y desafiante del marco de la tradición bíblica, que es Eclesiastés, Woody Allen en esto no sólo es una figura judía reconocida, sino que es de las primeras figuras judías reconocidas en el cine norteamericano, representa una perspectiva de vida que aparece dentro de la biblia hebrea, con la diferencia que la biblia ofrece una solución al problema diferente. En términos de diagnóstico de la situación humana, Woody Allen coincide mucho con Kohelet.

“הבל הבלים” (Ebel Abalim) Kohelet es famoso porque dice “Todo es vanidad, todo pasa, todo fluye, nada es estable, todo se repite, no hay posibilidad de cambio”, el famoso Vanidad de vanidades, todo eso es Kohelet, y hay muchas frases que él va a decir.

Fueron dos figuras que abrieron la presencia de judíos en el cine, una de ellas fue Woody Allen y la otra Barbra Streisand, en los 60’s son los primeros que van a aparecer con personajes claramente judíos que le van a dar una visión interesante.

Woody Allen aparece como una figura que es Shlemiel, una figura torpe, anti héroe, las cosas le salen mal, Woody Allen juega ese papel en el ámbito como figura, pero él no es así, tiene unos rasgos comunes, pero no hay que confundir Woody Allen la persona y Woody Allen el personaje.

Por eso Daniel Fainstein lo compara con Kohelet, porque está en la búsqueda de sentido en la vida y la búsqueda en un mundo que no tiene sentido, un mundo que es cruel, que es violento, que es terrible. Todo el mundo es vano y nada puede cambiar los hechos básicos de la vida.

Para Woody Allen, los judíos, lo judío, es una metáfora de su propia ansiedad, la Shoá es un elemento clave que aparece muchísimo en sus obras sin embargo no es una presencia activa, el judaísmo es la esencia que estructura sus películas, el judaísmo aparece en un contexto irónico, de risa que sigue una tradición bastante arcaica e inicia con los primeros escritores hebreos e idish, quienes inician esta idea de reírse o cuestionar el propio estilo de vida tradicional.