Enlace Judío México – En una entrevista a Radio Kan Bet de Israel, el embajador de Israel en Paraguay, Zeev Harel elogia las crecientes relaciones bilaterales entre ambos países y revela cómo el presidente paraguayo Horacio Cartes decidió trasladar la embajada a Jerusalén siguiendo los pasos de Estados Unidos y Guatemala.
“Cabe mencionar que el pueblo paraguayo ama a Israel”, dice el embajador. “El presidente Cartes es un gran amigo de Israel y tiene una relación especial con el primer ministro Benjamín Netanyahu”.
“Invitamos al presidente Cartes y a todos los altos funcionarios del gobierno a las celebraciones del 70 aniversario de la independencia de Israel. Afortunadamente llegaron muchos representantes, entre ellos el presidente Cartes y el presidente electo Mario Abdo Benitez quien asumirá el cargo el 15 de agosto”.
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“El presidente Cartes se sentó a mi lado y conversamos sobre la importancia de Jerusalén para el pueblo judío. Le pregunté: ¿Cómo es que usted Sr. Presidente no ha trasladado la embajada de Paraguay a Jerusalén? Y respondió emocionado, ‘Le pido que el primer ministro Benjamín Netanyahu me contacte, yo quiero trasladar la embajada a Jerusalén'”.
“Desde esa charla, las cosas sucedieron muy rápido”, comenta Harel. “Tres semanas más tarde, el presidente Cartes ordenó el traslado, la embajada se abrió y estamos muy contentos por ello”.
“Cartes tomó la decisión sin consultar al presidente electo, pero la decisión es legítima legalmente. Benitez también es un gran amigo de Israel y creemos que la situación no cambiará cuando asuma el cargo”.
“Paraguay es un país católico de 7 millones de habitantes en un área 18 veces más grande que el Estado de Israel, con mucha vegetación. La mayor parte de su población simpatiza con Israel”, explica Harel.
Históricamente, Paraguay votó a favor de la resolución 181 de las Naciones Unidas en la que se acordó la partición de Palestina en un Estado judío y otro árabe en 1947.
“Las relaciones unilaterales son muy buenas”, continúa el embajador israelí. “Las misiones diplomáticas, tanto en Israel como en Paraguay son muy activas y ambos países colaboran en proyectos de agricultura, educación y alta tecnología”.
Harel expresa la esperanza de que otros países de Latinoamérica reconozcan a Jerusalén como la capital de Israel y sigan los pasos de Paraguay, que trasladó su embajada después de EE.UU. y Guatemala.
“Estamos poniendo la historia en el sitio correcto. Tengo sólo una cosa que decirles, los amo, dijo el presidente paraguayo Horacio Cortes en Jerusalén.
“Cartes dijo además que quien no logra comprender ‘por qué reconocemos a Jerusalén como la capital de Israel debe abrir la Biblia'”, concluyó Harel.
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