Enlace Judío México – El rabino Jonathan Sacks, llegó a decir que Turgel era “una de las sobrevivientes del Holocausto más notables que tuve el privilegio de conocer. 

La escritora polaca y sobreviviente del Holocausto Gena Turgel, que proporcionó consuelo a Ana Frank durante sus últimos días de vida, murió este fin de semana en Inglaterra a los 95 años de edad.

Sus conmovedoras memorias fueron plasmadas en su libro “Enciendo una vela”, que se publicaron en 1987.

“Mi historia es una historia de supervivencia”, dijo recientemente en una ceremonia del Día del Holocausto en abril pasado. “También es una historia de 6 millones que perecieron. Y tal vez por eso me perdoné, para que mi testimonio sea un monumento conmemorativo. Como la vela que encendí para los hombres y mujeres que no tienen voz”.

Nacida en Cracovia, Polonia, en 1923, se trató de la menor de nueve hermanos. Después de que la Alemania Nazi invadiera su país en 1939, su familia recibió la orden de entregar todas sus pertenencias. Un hermano recibió un disparo y ella, varios hermanos y su madre se mudaron al gueto de Cracovia.

Fue enviada al campo de trabajo de Plaszow y luego formó parte de una marcha forzada a Auschwitz-Birkenau en 1944. Meses después formó parte de la “marcha de la muerte” hacia Buchenwald antes de ser finalmente enviada al campo de Bergen-Belsen donde trabajó en un hospital. Fue allí cuando ella cuidó a Anne Frank poco antes de que muriera de tifus en el invierno de 1945.

“Le lavé la cara, le di agua para beber, y todavía puedo ver su rostro, su cabello y su aspecto. No sabíamos que ella era especial, pero era una chica encantadora. Aún puedo verla allí tumbada con la cara, que estaba tan roja como si hubiera tenido acné. Y luego murió”, contó Turgel al diario inglés The Sun en el año 2015.

Semanas más tarde el campamento fue capturado por las tropas británicas que penetraban en los dominios del tambaleante Reich. Entre los libertadores estaba el soldado británico Norman Turgel. Seis semanas, Gena y él se casaron. Su vestido de novia, hecho con fragmentos del paracaídas de un paracaidista británico, se exhibe en el Museo Imperial de la Guerra de Londres. Gracias a esta especial boda realizada durante la calma al final de la la tormenta bélica, Gena ganó desde entonces el apodo de “La Novia de Belsen”.

Con una nueva vida en Inglaterra después de la guerra, Turgel se dedicó a transmitir su experiencia en el Holocausto a las nuevas generaciones hasta sus últimos meses de vida.

El rabino Jonathan Sacks, llegó a decir que Turgel era “una de las sobrevivientes del Holocausto más notables que tuve el privilegio de conocer. Ella fue una bendición e inspiración para nuestra comunidad. Su trabajo para educar a las generaciones sobre los horrores del Holocausto fue tan poderoso como incansable. A lo largo de su vida, encendió innumerables velas en el corazón humano y ayudó a traer mucha luz al mundo”.

Fuente: USA Today / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico