Enlace Judío México – El plan de la administración de Trump para la paz en Oriente Medio será la base para negociaciones directas entre Israel y los palestinos, según funcionarios estadounidenses.

AMIR TIBON

“La Casa Blanca espera compartir el plan no sólo con los líderes regionales, sino también con el público en general. Nuestra principal prioridad es darlo a conocer en el momento adecuado, de manera que los diversos elementos que no quieren que el plan funcione, tengan menos posibilidades de causar daño”.

Los funcionarios rechazan los informes de que el plan propone un acuerdo de paz final que ambas partes tendrán que aceptar o rechazar.

“Hemos señalado repetidas veces que no queremos imponer un acuerdo. Somos sólo un facilitador. Sería arrogante suponer que sabemos más que otros”, dijo un segundo funcionario. “Finalmente, ambas partes tendrán que negociar y llegar a un acuerdo. Queremos ayudarlos a llegar a ese punto, pero no podemos estructurar el acuerdo para ellos”.

Los funcionarios criticaron al presidente de la Autoridad Palestina Mahmoud Abbas por negarse a comprometerse con la administración desde que Trump reconoció a Jerusalén como la capital de Israel en diciembre pasado. “Suponemos que habrá críticas justas y sustanciales al plan, pero estamos asombrados de que Abbas ni siquiera quiera verlo. Sería una pena para el pueblo palestino si sus líderes se niegan a comprometerse con este plan”.

Sin embargo, los funcionarios subrayaron que la administración de Trump no está buscando una forma de eludir a Abbas, y no dialogamos con ninguna otra figura política palestina. “No estamos tratando de involucrar a otro líder palestino, sólo al presidente Abbas. Él es el único relevante, y él es con quien esperamos trabajar”, dijo un funcionario.

El mes pasado, Haaretz informó que el jefe de seguridad de Abbas, Majid Faraj, y el actual secretario de Estado Mike Pompeo se reunieron cuando Pompeo aún presidía la CIA. Funcionarios palestinos explicaron que la reunión se centró sólo en cuestiones de seguridad e inteligencia, que no están incluidas en el boicot político y diplomático de la Autoridad Palestina contra la administración.

Los funcionarios de la administración enfatizaron que hay indicios de un acercamiento de los países árabes con Israel, pero agregaron que no se hacen ilusiones de que el mundo árabe “abandone” a los palestinos como parte de una alianza con Israel. “No es realista esperar que los árabes abandonen a los palestinos. Eso no va a suceder”, dijo uno de los funcionarios. “Desde el punto de vista de la administración, los países árabes pueden motivar a ambos lados a avanzar en las negociaciones, pero no se espera que obliguen a ninguna de las partes”.

Bajo administraciones anteriores, el enfoque con respecto a la exposición de planes detallados para la paz en Oriente Medio ha sido distinto. La administración de George W. Bush lanzó su “Hoja de Ruta para la Paz” en un discurso del presidente, mientras que el plan de paz del ex secretario de Estado John Kerry nunca se hizo público.

La administración actual está considerando exponer su plan de paz al público, luego de compartir su versión final con los líderes de la región. “Queremos que el público conozca su contenido, en el momento adecuado, porque el público debe apoyarlo, no sólo los líderes”, dijo un funcionario. “El público es parte del proceso. Los líderes deben contar con el apoyo del público para seguir adelante”.

Los funcionarios no compartieron detalles específicos del plan, que según dicen, está a punto de finalizarse. Jared Kushner, yerno y asesor principal del presidente, viajará a la región la próxima semana con Jason Greenblatt, enviado especial de Trump para el proceso de paz en Medio Oriente. Ambos discutirán el plan con líderes en Israel, Egipto, Arabia Saudita y posiblemente otros países también.

Por supuesto, el objetivo principal de la política exterior estadounidense esta semana fue la cumbre de Trump con el líder norcoreano Kim Jong Un en Singapur. Los funcionarios dijeron a Haaretz que el enfoque inusual de la política exterior de Trump está funcionando, y agregaron que “este evento debería dar esperanzas a los pueblos del Medio Oriente de que las cosas pueden mejorar”.

Un funcionario sostuvo que “este evento muestra que las cosas pueden cambiar repentina e inesperadamente, y que las actitudes pueden suavizarse y modificarse. Nuestro equipo tiene mucha experiencia en negociaciones. Sabemos que las posiciones pueden cambiar. Sabemos que los puntos de vista pueden transformarse”.

Los funcionarios aseguraron que un acuerdo de paz en Oriente Medio sigue siendo una prioridad para Trump. “El presidente está centrado en impulsar un acuerdo de paz entre Israel y los palestinos, así como en la cuestión coreana”.

A pregunta expresa de si es posible que tras su cumbre con Kim, Trump pierda interés en un acuerdo israelí-palestino ya que no necesita un logro de política exterior ante el público estadounidense, un funcionario utilizó una metáfora de la carrera inmobiliaria de Trump para explicar por qué está convencido de que eso no sucederá.

“El presidente construyó una Torre Trump y luego construyó otras cinco torres”, dice el funcionario. “No se conformó con una”.

Fuente: Haaretz / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico