Enlace Judío México.- Después de localizar a los niños y su entrenador de fútbol desaparecidos, quienes intervinieron en el rescate ahora deben descubrir cómo extraerlos del peligroso complejo de cavernas inundado.
Los rescatistas israelíes han sido parte de un esfuerzo internacional para llegar a los 12 niños y su entrenador de fútbol atrapados por más de una semana en una cueva inundada en Tailandia, y han dicho a los medios israelíes que se temía que algunos buzos involucrados en la operación estén muertos.
Entre los israelíes que se sumaron a la operación estaba Yuval Zalmanov, un empleado de Maxtech Networks, una compañía israelí que fabrica dispositivos de comunicaciones de emergencia, que voló el lunes pasado, informó el sitio de noticias Walla el sábado.
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Otro israelí involucrado en la operación es Asaf Zmirly, que vive en Tailandia y es dueño de una compañía de rescate, según el informe. Contactó a Hanuni el lunes.
“Sin mucha vacilación, tomé el equipo, dije que había un incidente y que alguien tenía que ir a Tailandia“, dijo Hanuni. “Obtuve la licencia para sacar los dispositivos de comunicación de Israel, y uno de los empleados se ofreció voluntario para volar con ellos ese mismo día. Al día siguiente, llegó a la escena, se sentó con Asaf y comenzaron el rescate“.
Los rescatistas lo denominaron “misión imposible“, pero desafiaron las probabilidades de localizar a los 12 niños y su entrenador de fútbol en un complejo de cuevas inundadas. Sin embargo, la parte difícil aún puede estar por delante: sacarlos de forma segura.
Los 13 fueron encontrados el lunes, más de una semana después de su desaparición, lo que generó esperanza en una búsqueda desesperada que atrajo la ayuda internacional y cautivó a la nación.
La cueva de Tham Luang, donde los niños han quedado atrapados, es una de las más largas de Tailandia a 10 kilómetros (seis millas) y una de las más difíciles de navegar con sus sinuosos corredores y a veces estrechos.
Los expertos advirtieron que podrían pasar meses antes de que retrocedan las aguas.
Las fuerzas de rescate están enviando suministros de alimentos que podrían durar más de cuatro meses en la cueva parcialmente inundada en el norte de Tailandia.
Aquí hay algunas maneras en que los niños hambrientos y débiles podrían salir, ninguna de las opciones es fácil.
¿Podrían bucear?
En teoría sí: pero es una tarea extremadamente difícil. El buceo en cuevas ya es muy arriesgado, especialmente para niños pequeños en un estado debilitado que no tienen experiencia de buceo.
Si se sumergen, no tienen más remedio que seguir los pasos que los expertos en rescate tomaron a través de pequeños pasadizos obstruidos con barro y sedimentos.
Ese viaje requiere de un buzo SEAL de la Marina saludable y hábil unas seis horas.
Las autoridades dijeron que tratarían de entrenar a los niños para usar equipos de buceo crucial después de que se rehabiliten con alimentos, agua y apoyo médico.
“El buceo en cuevas es una habilidad muy técnica y es extremadamente peligroso, especialmente para un buzo no entrenado“, dijo a AFP Anmar Mirza, coordinador de la Comisión Nacional de Rescate de Cuevas de Estados Unidos.
“Así que pueden terminar siendo mejor tratar de suministrarles en la cueva hasta que puedan ser extraídos por otros medios“.
¿Podrían ser extraídos excavando?
Los exploradores han pasado días recorriendo la cima de la montaña en busca de posibles aperturas alternativas. Han encontrado algunas pistas “prometedoras” y han tratado de profundizar más.
Pero no hay indicios de que alguna de esas chimeneas se conecte a la cámara donde los niños se han quedado varados.
Una vez más, los niños necesitan pasar más tiempo fortaleciéndose en las profundidades de la cueva antes de que puedan intentar escalar una segunda entrada, si se encuentra una, o ser sacados.
¿Qué hay de salir caminando?
Esta sería la opción más segura, pero por el momento es imposible porque partes de la ruta permanecen inundadas.
Entonces, en teoría, podrían esperar, pero eso significa esperar que las aguas de las inundaciones disminuyan.
Las bombas de agua trabajan todo el día para drenar las inundaciones, aunque ha sido una batalla cuesta arriba durante gran parte de la semana debido a que las fuertes lluvias no han disminuido.
Si la pausa actual en el mal tiempo dura, esta opción podría ser más prometedora.
Pero los pronosticadores climáticos advierten que pronto regresarán los aguaceros a medida que la temporada del monzón se instala.
“Si la lluvia llena el sistema de cuevas, pueden pasar meses antes de que el agua vuelva a bajar“, dijo a la AFP el buzo belga Ben Reymenants, propietario de Blue Label Diving en Tailandia, quien está ayudando en la búsqueda.
¿Cuánto tiempo podría tomar?
Es difícil decirlo con certeza. Depende de cuánto tarden en recuperar fuerzas.
Los expertos dicen que podrían permanecer adentro durante semanas, o incluso meses, mientras los rescatadores encuentran la opción más segura para su extracción.
El ejército dijo el martes que estaba preparando suficientes alimentos para cuatro meses, pero no especificó que podrían estar allí por tanto tiempo.
¿Están los muchachos en la actitud correcta para moverse?
Ellos claramente quieren irse. En las imágenes que surgieron después de que los dos buzos británicos encontraron a los niños a última hora del lunes, uno pide “salir”.
Una de las respuestas del buzo “Lo sé, entiendo … no, no hoy“.
Incluso si están en buena forma física para bucear, necesitarán la destreza mental para mantener la calma en las aguas turbias y los pasadizos claustrofóbicos que se interponen entre ellos y la libertad.
Afortunadamente, parecen estar en muy buena forma, considerando las circunstancias.
“Están mentalmente estables, lo que en realidad es bastante bueno“, dijo Reymenants.
“Afortunadamente, el entrenador tuvo la cordura mental para mantenerlos a todos juntos, acurrucados para conservar su energía, lo que básicamente los salvó“.
Fuente: The Times of Israel / Traducción: Silvia Schnessel / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico
