Enlace Judío – Tras lo sucedido esta semana al Muro de los Lamentos, diversas voces palestinos revivieron la añeja acusación contra de Israel de sus supuestos planes para destruir el sitio sagrado musulmán localizado sobre el Monte del Templo.
La piedra de 100 kilogramos que cayó del Muro de los Lamentos demuestra que Israel ha diseñado un plan para destruir la Mezquita Al-Aqsa en Jerusalén, afirmó el jueves un portavoz del partido palestino Fatah, que tiene las riendas de la Autoridad Palestina.
Desde el lunes en que ocurrió el inusual hecho en la sección de rezo igualitario “Ezrat Israel” al sur de la plaza principal, los palestinos han utilizado el incidente para revivir su acusación de larga data de que Israel planea destruir la Mezquita de Al-Aqsa para reconstruir el Tercer Templo, de acuerdo al portal The Times of Israel.
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Osama Qawassmeh, portavoz de Fatah, dijo este jueves que la caída de la piedra era una “señal peligrosa de lo que estaba sucediendo en la Mezquita de Al-Aqsa y sus alrededores”, aludiendo a los trabajos arqueológicos israelíes en la zona del Monte del Templo.
“Afirmamos que la Mezquita de Al-Aqsa y sus alrededores, incluido lo que está debajo de ella, son puramente islámicos”, dijo Qawassmeh. “Los judíos no tienen derecho a eso”, agregó.
Qawassmeh dijo que las visitas de judíos al Monte del Templo, así como las excavaciones arqueológicas israelíes en el complejo religioso son un “crimen contra todas las religiones y una flagrante violación de la santidad de la religión del Islam”.
Al acusar a Israel de trabajar para convertir el conflicto palestino-israelí en un conflicto religioso, Qawassmeh dijo que las acciones de Israel “envalentonaron y alentaron el extremismo religioso ciego”.
También acusó al gobierno israelí de planear “enterrar cualquier perspectiva de coexistencia en la región”. Jerusalén, agregó, es “puramente árabe y palestina, y no puede haber paz y estabilidad sin terminar con la ocupación israelí de la ciudad”.
Omar Kiswani, director de la Mezquita Al-Aqsa, también intervino en el tema, alegando que fue el resultado directo de las excavaciones arqueológicas israelíes. Las autoridades israelíes prohibieron a los funcionarios del Departamento del Waqf en Jerusalén, el organismo religioso musulmán encargado del sitio, examinar el área donde cayó la piedra, dijo.
El incidente, dijo Kiswani, confirma las afirmaciones del Waqf de que Israel está llevando a cabo una peligrosa excavación arqueológica en el área del Monte del Templo. Pidió que se envíe un comité internacional al área para que investigue las acciones de Israel.
Yusef Natsheh, director de Arqueología Islámica y Turismo en el Monte del Templo, afirmó que el desprendimiento de la roca “no era casual”.
“Este es un incidente peligroso”, dijo Natsheh. “Probablemente fue planeado previamente. Esto podría haber sido una prueba o un experimento para determinar la dirección de la excavación trabajando el espesor de las paredes de la Mezquita de Al-Aqsa”, dijo.
Natsheh dijo que el Departamento de Waqf en particular y los musulmanes en general estaban muy preocupados por este incidente.
El Departamento de Waqf dijo el miércoles que formó un “equipo de crisis” para dar seguimiento al incidente. El Mufti de Jerusalén, el jeque Mohamed Hussein y los jefes del Waqf afirmaron recientemente que las continuas excavaciones arqueológicas israelíes “pusieron en peligro” la Mezquita de Al-Aqsa.
El director del Waqf, Azzam Al-Khatib, expresó “profunda preocupación” por los trabajos de excavación. Afirmó que Israel estaba tratando de conectar una serie de túneles bajo el Monte del Templo. Khatib pidió a la UNESCO que envíe un equipo para investigar las acciones de Israel cerca del sitio sagrado.
Fuente: The Jerusalem Post / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico
