(JTA) — El antisemitismo es una construcción artificial creada para silenciar a los críticos de los judíos, dijo el primer ministro malayo, Mahathir Mohamad.

“Hay una raza que no puede ser criticada. Si eres antisemita, parece casi como si fueras un criminal”, dijo Mohamad en una entrevista con The Associated Press el lunes, negando que despreciara a los judíos, como tal. “Antisemita es un término que se inventa para evitar que las personas critiquen a los judíos por hacer cosas incorrectas”.

“Cuando alguien hace algo mal, no me importa lo grande que sea. Pueden ser países poderosos, pero si hacen algo mal, yo ejerzo mi derecho a la libertad de expresión. Me critican, ¿por qué no puedo criticarlos?”.

Mohamad, un antisemita declarado, juró como primer ministro en mayo, casi dos décadas después de la última vez que ocupó el cargo. Él es bien conocido por su retórica antisemita, escribiendo en su blog personal en 2012 que “los judíos gobiernan este mundo por poder”.

En 2003, al hablar en la cumbre de la Organización de la Conferencia Islámica en Kuala Lumpur, dijo que “1.3 mil millones de musulmanes no pueden ser derrotados por unos pocos millones de judíos. Debe haber una forma. Y sólo podemos encontrar un camino si nos detenemos a pensar, a evaluar nuestras debilidades y nuestra fortaleza, a planear, a diseñar estrategias y luego a contraatacar. En realidad somos muy fuertes. 1.3 mil millones de personas no pueden ser simplemente eliminadas. Los europeos mataron a 6 millones de judíos de 12 millones”.

También dijo: “Me alegra que me etiqueten de antisemita […] ¿Cómo podría ser de otra manera, cuando los judíos que tan a menudo hablan de los horrores que sufrieron durante el Holocausto muestran la misma crueldad y dureza de los nazi no sólo contra sus enemigos, sino incluso contra sus aliados, si tratan de detener la matanza sin sentido de sus enemigos palestinos”.

Escribió en su libro de 1970 “El dilema malayo” que, “Los judíos no solamente tienen nariz ganchuda, sino que entienden el dinero instintivamente”.

En 2007, Mohamad no estaba en el cargo cuando anunció la creación de un tribunal de crímenes de guerra que se centraría en las víctimas de abusos en Iraq, Líbano y los territorios palestinos.

A los 92 años, él es el mandatario elegido más viejo del mundo. Anteriormente se desempeñó como primer ministro desde 1981 hasta 1999.

A pesar de la controversia en torno a sus declaraciones, le dijo a la agencia AP que no le importaba particularmente su legado ni cómo sería recordado.

“Francamente no me importa. No estaré cerca “, dijo. “Cuando esté muerto, no importará a nadie”.

De la traducción (c)Enlace Judío México
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