(JTA) — Los israelíes eventualmente tendrán un primer ministro llamado Mohammed si hay una solución de único Estado para el conflicto palestino-israelí, dijo el presidente Donald Trump al rey Abdalá de Jordania, según reportes.

Según el portal Axios, Abdalá comentó al ministro de Relaciones Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, sobre los comentarios de Trump durante una reunión en Amán a principios de este mes, recordando cómo le dijo a su homólogo estadounidense que “muchos jóvenes palestinos ya no quieren la solución de dos Estados, pero preferirían vivir junto con los israelíes en un Estado con los mismos derechos para todos”.

Tal resultado, dijo el rey, significaría que Israel “perdería su carácter judío”.

Abdalá describió a Trump respondiendo, un poco sarcásticamente, que su observación tenía sentido y que en tal caso, “el primer ministro de Israel en unos pocos años se llamará Mohammed”.

El apoyo para una solución de dos Estados entre israelíes y palestinos cayó recientemente a un mínimo histórico. Según una nueva encuesta realizada por la Universidad de Tel Aviv y el Centro Palestino de Investigación de Política y Control en Ramallah, solo el 43% de los judíos y palestinos israelíes respaldan una solución así negociada para el conflicto, un descenso de 9 y 8 puntos desde 2016, respectivamente.

En sus declaraciones públicas, Trump ha permanecido un tanto agnóstico con respecto a los lineamientos de un acuerdo final entre Israel y los palestinos. Durante una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu en febrero de 2017, el presidente expresó ambivalencia sobre la forma en que se llevaría a cabo un acuerdo final, diciendo que estaba “esperando por dos Estados, y un Estado, me gustará lo que les guste a ambas partes”.

“Estaré muy contento con lo que les guste a ambas partes. Puedo vivir con cualquiera de los dos”, dijo Trump.

Luego de que se le preguntara si había descartado el concepto de dos Estados, Trump dijo: “No, me gusta la solución de dos Estados”. Sin embargo, agregó, “en última instancia, me gusta lo que les guste a ambas partes”.

Esta posición divergió fuertemente con la de los presidentes anteriores de EE.UU., que han dicho que los dos Estados son la única solución viable para resolver el conflicto.

La administración de Trump aún tiene que revelar su muy publicitado plan de paz para el Medio Oriente, que está siendo desarrollado por Jared Kushner, su yerno y asesor principal; Jason Greenblatt, un representante especial para negociaciones internacionales; David Friedman, el embajador de EE.UU. en Israel; y Nikki Haley, representante de EE.UU. ante las ONU. Con excepción de Haley, todos los funcionarios de la administración que trabajan en la propuesta son judíos ortodoxos.

El equipo lanzó una declaración conjunta la semana pasada diciendo que “nadie estará satisfecho con nuestra propuesta, pero así debe ser si se quiere lograr una paz real. La paz sólo puede tener éxito si se basa en realidades”.

“Fuimos los primeros en luchar contra ella y continuaremos luchando contra ella hasta que se derrumbe”, dijo el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, sobre el plan de la administración la semana pasada durante una sesión del Consejo Central de la Organización para la Liberación de Palestina. “Esta es la ‘bofetada del siglo'”.

Respondiendo a los supuestos comentarios de Trump, el miembro israelí-árabe de la Knésset, Ahmad Tibi, tuiteó en broma que él sería el próximo primer ministro.

“Señor Presidente, usted también está confundiendo los nombres”, escribió en Twitter. “Ahmad, no Mohammed. Ahmad”.

De la traducción (c)Enlace Judío México
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