Enlace Judío México – Alrededor de 500 manifestantes organizaron una marcha neonazi en las calles de Berlín para conmemorar la muerte de quien fue mano derecha de Adolfo Hitler: Rudolf Hess, el ex oficial nazi que fue capturado por las fuerzas británicas en 1941.

Sin embargo, la marcha fue rechazada por cientos de contramanifestantes, algunos de los cuales arrojaron piedras y botellas contra los neonazis, otros cargaban pancartas con expresiones de rechazo y es que los contramanifestantes, convocados por sindicatos, partidos políticos, sectores religiosos y otras facciones, superaron en gran número a los neonazis.

Aproximadamente 2,300 agentes de policía fueron asignados a preservar la seguridad de ambas partes. El inicio de todo lo sucedido comenzó en el oeste de la capital alemana, en el lugar donde años atrás, se encontraba la prisión en la que el ex oficial nazi de alto rango Rudolf Hess cumplió condena por sus crímenes.

Hess fue condenado a cadena perpetua en los juicios de Núremberg en los que sostuvo que no se arrepentía de nada. Fue así como Rudolf Hess, Vicepresidente del Partido Nacional-Socialista se suicidó en una prisión de Berlín en agosto de 1987, después de haber permanecido más de 40 años en prisión.

En la actualidad, queda claro que las atrocidades nazis siguen siendo aplaudidas por algunos, sin embargo, en la mayor parte de la sociedad alemana están más que claros los valores de igualdad y de tolerancia, y esta marcha lo demostró.