Enlace Judío México e Israel – “Una red social que aboga por la libertad de expresión, la libertad individual y el flujo libre de información en línea. Todos son bienvenidos”, dice Gab en un mensaje a los que acceden a su portal.

Al tenor de que sitios como Facebook o Twitter tomaran cartas en el asunto contra los posicionamientos de extrema derecha en línea, miles de usuarios en el internet que enarbolan estas ideas sin tapujo alguno tuvieron que buscar un refugio.

Desde el incremento visible de estos modernos grupos norteamericanos en el último par de años, donde surca la llamada “alt-right”, estos argumentan que algunas de sus opiniones políticas y sociales no constituyen ningún tipo de discurso de odio como pareciera ser, por lo que acusan a sus detractores de ser autoritarios en su contra.

Establecida en Pensilvania en el año 2016 por el emprendedor Andrew Torba, Gab fue delineado para contrarrestar esto y supuestamente ofrecer a sus usuarios una libertad de expresión mucho más plena sin el riesgo de cualquier tipo de censura como la que dicen buscar.

Con un sistema de microblogging sencillo similar a Twitter, los usuarios interactúan a través de “gabs”, mensajes con un límite de 300 caracteres.

Y así fue como esta se ha visto inundada por miembros del espectro conservador norteamericano y por sus brotes más radicales, tales como neonazis, negacionistas del Holocausto, supremacistas blancos y cualquier otro tipo de individuo de extrema derecha que busca dar su voz sin temor a nada detrás de una pantalla.

Algunos de sus miembros iniciales fueron el comentador derechista británico Milo Yiannopoulos, y Andrew Anglin, fundador norteamericano del sitio web neonazi Daily Stormer.

Para este año, cerca de 600 mil usuarios componen Gab, una cifra relativamente pequeña a comparación de otras redes como Facebook, pero muy activa en la diseminación de odio y racismo.

Apple bloqueó la aplicación de su tienda virtual en 2016, citando contenido pornográfico, y más tarde, discurso de odio. Google bloqueó la aplicación de propia tienda por discurso de odio, lo que trajo una demanda de Gab que finalmente se retiró.

Robert Bowers, que asesinó ayer a 11 personas dentro de la sinagoga The Tree of Life en Pittsburgh, se registró en Gab en enero de este año bajo el pseudónimo de @onedingo.

A través de publicaciones propias o de compartir las de otros usuarios, Bowers dejaba en claro sus líneas de pensamiento que rayaban en teorías de conspiración, negacionismo del Holocausto, un odio radical contra los judíos y un descontento con el gobierno del presidente Donald Trump, al no sentirse satisfecho ni con sus políticas ni al parecer con sus acercamientos positivos en torno a Israel y la comunidad judía.

Tan sólo minutos antes de la masacre donde lanzaría gritos de querer “matar a todos los judíos”, Bowers dejó su último mensaje en Gab, donde lanzó su ira contra una organización judía que aborda en su día a día una de las temáticas más detestables para cualquier ultranacionalista en cualquier parte del mundo, y dio indicios de lo que estaba a punto de cometer.

“A HIAS le gusta traer invasores que matan a nuestro pueblo. No me puedo sentar y ver a mi pueblo ser asesinado. Al carajo sus ópticas, me dirijo”.

Poco después del acto, el sitio de pagos en línea PayPal anunció que cancelaba su servicio a la página, ante lo cual Gab dijo que estaba en pleno derecho.

“La política de Gab.com sobre el terrorismo y la violencia siempre ha sido muy clara: no tenemos ninguna tolerancia al respecto. Gab desaprueba y condena inequívocamente todos los actos de terrorismo y violencia. Esta ha sido siempre nuestra política. Estamos tristes y disgustados por las noticias de violencia en Pittsburgh y mantenemos a las familias y amigos de todas las víctimas en nuestros pensamientos y oraciones”, respondió la compañía ante el acto, señalando que coopera con las autoridades alrededor del caso, y condenando además los señalamientos en su contra por hospedar a la comunidad virtual extemista descrita antes.

En las últimas horas desde la masacre, otros dos sitios que proporcionan servicios a Gab, las compañías Joyent y Stripe, anunciaron que los suspenderían de momento, después de la tormenta que se abalanzó sobre la página de internet.

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