Enlace Judío México e Israel – Calificado como “muy callado” e incluso “normal” por los vecinos de su residencia en el complejo McAnulty Acres del distrito Baldwin de la ciudad de Pittsburgh, Robert Bowers era sin embargo un individuo enérgico en la expresión de su ideología antisemita y extremista en las redes sociales.

Sin un historial criminal que lo mantuviera bajo la alerta de las autoridades, en el mundo exterior sólo presentaba una falta administrativa de tránsito registrada en el año 2015.

Pero en el mundo virtual, Bowers mantenía un perfil activo en la red social Gab, fundada en 2013 y vista como una alternativa a Twitter, donde existe “más libertad de expresión” de acuerdo a la propia página, lo que lo ha vuelto un albergue en línea para cientos o miles de otros norteamericanos como él con ideologías de extrema derecha que han sido o habrían sido bloqueados en cualquier otro portal.

Tras la masacre, la plataforma eliminó la cuenta de Bowers y condenó su acción, aunque aún se puede acceder a sus publicaciones usando páginas de archivo de internet.

La cuenta de usuario de Bowers era @onedingo, donde ostentaba una imagen de fondo en la que sobresaltaba el número 1488, una cifra popular entre los neonazis que se compone de dos elementos: las llamadas “14 palabras”: We must secure the existence of our people and a future for white children (Debemos de asegurar la existencia de nuestro pueblo y el futuro de los niños blancos); y el 88, un código numérico para la frase en alemán Heil Hitler, al ser la letra H la octava letra del alfabeto.

De la misma manera, su descripción biográfica sólo contenía la frase “los judíos son los hijos de Satán” y citaba un versículo del Nuevo Testamento cristiano: Juan 8:44.

A través de publicaciones propias o de compartir las de otros usuarios, Bowers dejaba en claro sus líneas de pensamiento que rayaban en teorías de conspiración, negacionismo del Holocausto, un odio radical contra los judíos y un descontento con el gobierno del presidente Donald Trump, al no sentirse satisfecho ni con sus políticas ni al parecer con sus acercamientos positivos en torno a Israel y la comunidad judía.

En una de ellas, Bowers aludió a la frase electoral de Trump con una imagen de una burla directa a los hornos crematorios nazis del Holocausto: “Make Ovens 1488F Again” (Pongan los hornos a 1488 grados Farenheit de nuevo).

Las armas fueron parte de su huella en la red, y en otra publicación mostró tres pistolas semiautomáticas del tipo Glock escribiendo, “Mi familia glock”, así como fotos de objetivos de tiro con agujeros de bala, haciendo alarde del “maravilloso gatillo” de su arma.

De acuerdo a autoridades de Pensilvania, el perpetrador de la que es considerada ya la peor masacre antisemita en EE.UU. en los últimos años, tenía 21 armas registradas a su nombre.

En una publicación del viernes a horas de irrumpir en la sinagoga Tree of Life, criticaba a Trump por ser “un globalista, no un nacionalista”, y aseguraba que no habría una “#MAGA (América grande de nuevo)” mientras siguiera existiendo la “infestación” judía.

Y tan sólo minutos antes de la masacre donde lanzaría gritos de querer “matar a todos los judíos”, Bowers dejó su último mensaje en Gab, donde lanzó su ira contra una organización judía que aborda en su día a día una de las temáticas más detestables para cualquier ultranacionalista en cualquier parte del mundo, y dio indicios de lo que estaba a punto de cometer.

“A HIAS le gusta traer invasores que matan a nuestro pueblo. No me puedo sentar y ver a mi pueblo ser asesinado. Al carajo sus ópticas, me dirijo”.

Fundada en 1881, cuando su idea inicial fue extender una mano de auxilio a todo judío que buscaba llegar a la Unión Americana para escapar de la opresión en la Rusia zarista, la Hebrew Immigrant Aid Society (Sociedad Hebrea de Ayuda al Inmigrante) es una organización sin fines de lucro que hoy provee de asistencia y auxilio a los refugiados de todo el mundo que buscan una mejor vida en EE.UU.

En los últimos días, Bowers se concentró en compartir y opinar en contra de la caravana migrante proveniente de Centroamérica con rumbo a EE.UU., que entre los grupos de extrema derecha supremacista del país ha desatado molestias y teorías conspirativas acerca de un supuesto orquestado respaldo judío a los inmigrantes, señalando algunos al empresario judío norteamericano George Soros como el responsable, una de las figuras más odiadas por la derecha nacionalista a nivel mundial.

En redes como Gab o 4chan, otro nido virtual de la llamada “alt-right” norteamericana, se han vuelto virales en días recientes imágenes como una tomada directo de una transmisión de TV de un camión con una estrella de David y centroamericanos que suben a ella intempestivamente en Guatemala, lo que ha alimentado estas ideas entre los usuarios.

“¡Hola qué tal HIAS! ¿Les gusta traer invasores hostiles para vivir entre nosotros?”, fue otra de las varias publicaciones de Bowers en contra de la organización judía que ha mostrado su solidaridad con la caravana y a favor de que EE.UU. ejerza un trato humano a la misma en el marco de la ley.

Como un “nuevo tipo de conflicto armado” y “un mal desarrollo para las naciones blancas” una publicación compartida hace una semana por Bowers calificaba así a la caravana, a la que solamente se le puede detener con el uso de la fuerza bruta, de acuerdo al usuario @brannon1776.

Ahora con 29 cargos de la fiscalía estatal levantados ayer sábado en su contra por el asesinato de 11 personas, entre ellos el crimen de odio, Bowers podría llegar a enfrentar la pena capital como castigo último a sus días, al ser su aplicación legal en el estado de Pensilvania.

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