Enlace Judío México e Israel – Los rivales políticos del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu exigen su renuncia e instan a elecciones inmediatas luego de que la policía recomendó levantar una acusación en su contra por soborno en un presunto caso de corrupción.

MICHAEL BACHNER

La recomendación pide acusar a Benjamín Netanyahu y su esposa, Sara, así como al magnate de los medios de comunicación Shaul Elovitch y su esposa Iris, por soborno y otros cargos de corrupción en el llamado Caso 4000.

El mandatario es sospechoso de aceptar sobornos y actuar en conflicto de intereses al tomar decisiones que beneficiaron a Elovitch, un magnate de los medios de comunicación que controla a Bezeq , la mayor empresa de telecomunicaciones de Israel y el sitio de noticias Walla, a cambio de una cobertura positiva de Netanyahu y su esposa. Este es el tercer caso en que la policía ha recomendado acusar al primer ministro.

Tras una investigación de nueve meses, la policía concluyó que “el primer ministro y sus asociados intervinieron de manera flagrante y continua, y a veces incluso a diario, en el contenido publicado por el sitio web de Walla News, y también buscaron influir en el nombramiento de altos funcionarios (editores y reporteros) a través de sus contactos con Shaul e Iris Elovitch,” la esposa del dueño de Bezeq.

La líder de la oposición, Tzipi Livni (Unión Sionista), dijo que “Netanyahu tiene que irse antes de que destruya a los organismos de seguridad para salvar su propia piel. El pueblo de Israel merece un liderazgo limpio”.

Livni y Yoel Hasson, presidente del partido Unión Sionista exigieron disolver el gobierno y convocar a elecciones inmediatas.

“Netanyahu, tu tiempo se ha acabado”, escribió Hasson en Twitter. “Israel debe celebrar elecciones, no en noviembre [como está previsto] ni en mayo, sino inmediatamente. Benjamín Netanyahu, quien está al tanto de sus investigaciones y sospechas, debe renunciar hoy sin postularse postularse en las próximas elecciones”.

El presidente de Yesh Atid, Yair Lapid, pidió al partido gobernante del Likud que destituya a Netanyahu de su cargo hasta que se puedan celebrar nuevas elecciones.

“Este es un día triste, triste para todos los ciudadanos israelíes … así como para todos aquellos que han conocido a Netanyahu durante decenas de años como yo y otros, y vieron el proceso de corrupción como resultado de demasiados años en el poder”, dijo Lapid en una declaración.

El líder del partido de la oposición dijo que Israel “merece más” que ser dirigido por un primer ministro que enfrenta problemas legales. “El Likud debe elegir a alguien más para que lleve al país a las próximas elecciones”.

Tamar Zandberg, líder del partido de izquierda Meretz dijo en un comunicado: “Una tercera recomendación para levantar una acusación por soborno no deja lugar a dudas. Un primer ministro sospechoso de la ofensa más grave en el libro de leyes israelí para funcionarios públicos no puede ocupar su cargo un día más. Netanyahu debe renunciar hoy e Israel debe ir a elecciones de inmediato”.

Netanyahu negó las acusaciones el domingo, acusando a la policía de una conspiración en su contra.

“Las recomendaciones de la policía para mí y mi esposa no sorprenden a nadie, como tampoco lo hace el transparente momento de su publicación”, escribió en Twitter.

“Estas recomendaciones se establecieron y se filtraron incluso antes de que comenzaran las investigaciones”, agregó. “Las recomendaciones de la policía no tienen ninguna base legal. Recientemente, las autoridades pertinentes rechazaron las recomendaciones de la policía contra una serie de funcionarios públicos. Estoy seguro de que en este caso también, las autoridades competentes llegarán a la misma conclusión que yo: nunca existió nada porque no hay nada”, aseguró.

La ministra de Igualdad Social, Gila Gamliel, emitió una declaración apoyando a Netanyahu: “Hace 20 años que conozco al primer ministro. Él no está corrompido y lo único que lo guía es el beneficio del Estado. Estoy seguro de que el fiscal general no aceptará [la recomendación]”.

Otros miembros del Likud criticaron al comisario saliente de la Policía de Israel, Roni Alsheij, de quien el primer ministro es enemigo declarado. Netanyahu le acusa de filtrar información a la prensa y de realizar una “caza de brujas”.

“La policía sigue cruzando todas las líneas. Alsheij quería darle a Netanyahu un regalo de despedida”, dijo miembro de la Knesset Miki Zohar a la Radio del Ejército, alegando que el comisionado saliente de la policía “presionó severamente a Lahav 433”, el escuadrón policial contra la corrupción, para llegar a las conclusiones publicadas el domingo.

El presidente de la coalición, David Amsalem dijo que “lo más sorprendente es el momento perfecto”.

Durante la reunión del gabinete, el ministro de Transporte Israel Katz “ofreció su apoyo al primer ministro en nombre de todo el gabinete”, según el portavoz de Netanyahu, a lo que el primer ministro respondió: “Gracias, pero parece que se lo está tomando más en serio que yo”.

El líder del partido Habait Hayehudí y ministro de Educación Naftali Bennett, emitió una extraña respuesta críptica a la noticia.

“Entiendo que yo era [lo que recibió] a cambio”, dijo, en una declaración, lo que se interpretó ampliamente que parte del acuerdo entre Netanyahu y Elovitch era una cobertura negativa de Bennett.

El ministro de Agricultura, Uri Ariel, colega de Bennett en el partido Habait Hayehudí, dijo: “Espero que la recomendación sea incorrecta y que el primer ministro sea absuelto y continúe prestando sus servicios en beneficio del Estado de Israel”.

Fuente: The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico