BUENOS AIRES, Argentina (JTA) — La superestrella del fútbol argentino Lionel Messi ahora está ligado indirectamente a Beitar Jerusalén, un popular equipo de fútbol israelí cuyos fanáticos han sido repetidamente acusados ​​de racismo.

Así es como funciona: Messi es el embajador de la marca Sirin Labs, una compañía de tecnología fundada por Moshe Hogeg. Hogeg también compró Beitar Jerusalén este año. La semana pasada, Messi se convirtió en la imagen promocional de Finney, un “teléfono inteligente del tipo blockchain” producido por Sirin Labs que viene con una billetera para criptomonedas.

Messi, que juega profesionalmente para el equipo español F.C. Barcelona, ​​ha ganado cinco veces el premio FIFA del Ballon D’Or, que se otorga al mejor jugador de fútbol del mundo.

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En un evento de esta semana, Hogeg le entregó a Messi una tarjeta de membresía para el club de fans de Beitar Jerusalem en un evento que promocionó el teléfono inteligente de Finney en Barcelona. Hogeg compró Beitar Jerusalem en agosto por 7.2 millones de dólares a Eli Tabib, quien era el propietario desde 2013.

Algunos de los fanáticos de Beitar Jerusalén se han ganado la reputación de fanatismo. Los fanáticos protestaron en 2013 cuando el equipo firmó a sus dos primeros jugadores musulmanes. En 2017, un asesor del equipo renunció después de decir que no firmaría a un jugador musulmán para el equipo. En 2012, después de un partido, los fanáticos de Beitar entraron en un centro comercial de Jerusalén y golpearon a los empleados árabes allí.

El equipo nacional de fútbol de Argentina, encabezado por Messi, tenía previsto jugar contra Israel en Jerusalén este año, pero el juego fue cancelado debido a las amenazas contra Messi emanadas de manifestantes anti-israelíes. Anteriormente había visitado Israel en 2013 con miembros del F.C. Barcelona.

De la traducción (c)Enlace Judío México
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