Enlace Judío México e Israel – Al comenzar el nuevo año, Israel abandonó oficialmente la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), a pesar de los esfuerzos recientes de la directora de la agencia para combatir su politización y un presunto sesgo anti-israelí.

La retirada entró en vigor a la medianoche tiempo de París. “La UNESCO es un organismo que continuamente reescribe la historia, incluso borrando la conexión judía con Jerusalén”, dijo el lunes el embajador de Israel ante la ONU, Danny Danon, al sitio The Times of Israel. “Está corrompido y manipulado por los enemigos de Israel, y continuamente selecciona al único Estado judío para la condena. No vamos a ser miembros de una organización que actúa deliberadamente contra nosotros”.

En octubre de 2017, pocos días después de que la administración de los EE.UU. anunció su retiro de la UNESCO debido, entre otras cosas, a su supuesto sesgo en contra de Israel, el Primer Ministro, Benjamín Netanyahu declaró que seguiría los pasos de la Casa Blanca. “Esperamos que la organización cambie sus formas pero no estamos confiando en esto; por lo tanto, mi directiva de dejar la organización es válida y seguiremos adelante para llevarla a cabo”, declaró unos días después.

Israel se unió a la UNESCO el 16 de septiembre de 1949 y alberga seis sitios del Patrimonio Mundial de la UNESCO, entre ellos Masada, la Ciudad Vieja de Acre, los Templos Bahai en Haifa y la “Ciudad Blanca” de Tel Aviv. Pese a la salida del organismo, estos sitios permanecerán en la lista, de acuerdo un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores en Jerusalén.

Los esfuerzos de la directora de la agencia, Audrey Azoulay, para que ambos países reconsideraran su salida de la UNESCO, incluidos los acuerdos de intermediación que hicieron que las resoluciones contra Israel se retrasaran o suavizaran, fueron en vano en los últimos meses. En octubre, por ejemplo, la Junta Ejecutiva de la agencia aprobó dos decisiones que criticaban a Israel, pero lo hizo de manera que respondiera a algunas de las preocupaciones de Jerusalén.

La agencia cultural celebró el movimiento como un signo de “buena voluntad”, pero Danon todavía lo criticó como una prueba más de las “mentiras y prejuicios” de la organización contra el Estado judío. Los dos textos sobre “Palestina ocupada” criticaron duramente a Israel, llamada “potencia ocupante” en su totalidad, por varias políticas con respecto a los palestinos. Por ejemplo, la Decisión 28, “lamenta profundamente los desarrollos militares en curso alrededor de la Franja de Gaza y su elevado número de víctimas civiles”, y se refiere a la Tumba de los Patriarcas en la Ciudad Vieja de Hebrón “una parte integral del Territorio Palestino Ocupado”. En la Decisión 29, el Comité Ejecutivo de la UNESCO dijo estar profundamente “preocupado por las violaciones del ejército israelí contra las universidades y escuelas palestinas” y se refirió a los Altos del Golán como territorio sirio ocupado. Sin embargo, en lugar de someterlos a un voto contencioso que aún habría terminado con su aprobación, la UNESCO en cambio agrupó los textos en un anexo no vinculante que fue aprobado por consenso, un proceso que Israel ha alentado en el pasado como un logro diplomático.

Azoulay, quien tomó el mando de la UNESCO en octubre de 2017, pocas horas después de que EE.UU. e Israel anunciaron su retiro de la organización, elogió “el espíritu de diálogo y el sentido de responsabilidad”, hablando de una “tendencia hacia el consenso… y la buena voluntad”.

En abril de 2017, el entonces embajador de Israel ante la UNESCO, Carmel Shama Hacohen, celebró el acuerdo para aprobar resoluciones anti-israelíes en anexos no vinculantes sin votación como un logro importante en la batalla del Estado judío contra la mayoría árabe automática en los organismos internacionales. “Estoy más que feliz” con el resultado, dijo en ese momento. Shama Hacohen se fue de París y fue elegido alcalde de Ramat Ganen octubre pasado en Israel. Fue reemplazado por un diplomático de carrera.

En septiembre, durante el marco de la Asamblea General de la ONU, Netanyahu consideró asistir a un evento de la UNESCO y reunirse con Azoulay en la Asamblea General de la ONU en Nueva York, pero luego sorprendentemente rechazó la invitación, citando el “sesgo persistente y notorio contra Israel”. Según reportes, Netanyahu se retiró del evento porque no quería molestar a la administración de Trump, que ha tomado una línea dura con la UNESCO

Fuente: The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío