Enlace Judío México ¿Imaginarías engañar al maestro de la propaganda y al mayor genocida de la historia? Entonces eres Hessy Taft.

Berlín, Alemania, 1935. La libertad de expresión y prensa, así como la comunicación privada están completamente coartadas. El Decreto del Incendio de Reichstag, aprobado hace dos años, es utilizado por el Führer (líder) Adolf Hitler para detener a opositores políticos y personas que no representan a la raza aria.

Aquellos que alaban y comparten las ideas del Partido Nacionalsocialista se sienten empoderados por la fuerza de su patria y de su raza; mientras los inseguros son bombardeados por carteles, programas de radio y periódicos que muestran a una Alemania y un Hitler invencibles.

Esto es posible gracias a Joseph Goebbels, Ministro de Propaganda, quien a través de su habilidades de comunicación y oratoria maneja y esparce el discurso de antisemitismo, anticomunismo y poder del Tercer Reich.

A pesar de la aprobación del régimen nazi, Goebbels presenta un concurso para encontrar al bebé más hermoso de raza aria, y así fortalecer la imagen del linaje perfecto. De todos los concursantes, el Ministro de Propaganda selecciona —por su propia cuenta— a una niña: Hessy Taft.

La foto de la aria perfecta se convierte en un símbolo de la ideología nazi. En revistas, postales, escaparates y carteles, la imagen de Hessy es un éxito. Goebbels está satisfecho, aunque no debería estarlo.

Hessy Taft: la bebé judía perfecta

Hessy Levinsons Taft es hija de una pareja de cantantes judíos, Jacob Levinsons y Pauline Levine, quienes migraron de Lituania en busca de nuevas oportunidades. Debido al ambiente de antisemitismo en Berlín, la pareja no puede seguir su carrera en la música y trabaja de manera intermitente. Con un par de ahorros logra comprar un pequeño apartamento viejo en los suburbios de Berlín.

Son principios de 1935, Hessy tiene seis meses de edad y sus padres contratan al fotógrafo Hans Ballin para que retrate la primer etapa de su vida. La fotografía les gusta tanto que deciden colgarla en la entrada del apartamento. Meses después el rostro de Hessy Taft tapizaría la capital alemana.

Al ver el retrato de su bebé en la portada de la revista Sonne ins Haus (El sol en casa), los Levinsons contactan de inmediato a Hans Ballin. Él había enviado —sin avisarles— la foto de Hessy al concurso del bebé ario perfecto.

Una acción sin permiso

Éste les cuenta que mandó 10 fotos al concurso, sabía muy bien que la familia era judía y su intención —en realidad— era faltarle el respeto al Tercer Reich y a su teoría de la raza perfecta: ridiculizarlos. A pesar de encontrarse en la boca del lobo, ambas partes concuerdan guardar el secreto, e inclusive la familia toma con un humor la situación.

Antes de la invasión a Polonia en 1939, los Levinsons regresan a Lituania y —poco antes de que estalle la guerra— huyen a París. Ahí un amigo les sugiere revelar la verdad sobre la fotografía de Hessy para golpear la credibilidad de los nazis, pero el señor Levinsons se niega por la seguridad de su familia.

Cuando las Escuadras de Protección (Schutzstaffel – SS) invaden el este de Francia, la familia Levinsons decide huir a Cuba en avión, para después navegar a los Estados Unidos. Ahí se establecen y obtienen la residencia estadounidense.

¿Qué fue de Hessy Taft?

En los 60, Hessy Taft se gradúa en Química y se convierte en profesora. Es hasta 1990 cuando da una entrevista al Museo del Holocausto en Washington, DC, en la cual admite —por primera vez— ser la bebé aria perfecta.

“Puedo reírme ahora. Pero si los nazis hubieran sabido quién era, no estaría viva”.

Hitler y Goebbels se suicidaron en escenarios distintos en 1945 sin conocer que una de las imágenes más simbólicas de su movimiento fue una niña judía.