Enlace Judío México e Israel.- La noche del 14 de marzo, la ciudad mozambicana de Beira (de medio millón de habitantes) fue devastada casi por completo por vientos de 225 km/hr. y olas de 6 metros de altura. Las líneas eléctricas y los árboles se cayeron en muchas partes de la ciudad y gran parte del techo del Hospital Central se derrumbó, quedando partes de éste inundadas y sin electricidad.

Hasta ahora, el Ciclón Idai—que también afectó a las provincias de Sofala, Zambezia, Manica e Inhambane— ha causado la muerte de 598 personas (Gobierno de Mozambique). El derrumbe de una presa, tres días después del ciclón, ha inundado regiones aledañas a Beira, generando una pérdida de vidas significativa aun no cuantificada

Con 1,85 millones de afectados en Mozambique; 869.000 en Malawi y 270.000 en Zimbabue—el ciclón es el más grande desastre que ha acaecido en el hemisferio sur.

Respondiendo al llamado de ayuda, cuatro integrantes de CADENA viajaron a Mozambique para distribuir 200 lámparas solares de emergencia e implementar y capacitar a las personas en el uso de 271 filtros de agua en un momento en el que se han registrado 1,052 casos de cólera.

Desde su aterrizaje,  el equipo contactó a ONG’s, entidades internacionales (NATAN) y actores locales (Remar, Help Age y comunidad judía en Maputo) y se desplazaron a la zona del desastre, donde se realizó un trabajo con socios locales y agencias para distribuir la ayuda de la manera más estratégica posible.

Se acordó que las lámparas solares de emergencia, que pueden dar hasta 8 horas de luz y tienen una larga vida útil— se distribuirán en los lugares en donde la energía eléctrica no haya sido reestablecida. Y los filtros—con una duración de al menos 5 años y capaces de filtrar 99.9% de las bacterias—serán colocados en lugares estratégicos para beneficiar hasta a 50,000 personas en la prevención de enfermedades como la diarrea y el cólera.