Enlace Judío México e Israel.- “La vida, instrucciones de uso” (1978) de Georges Perec es todo un rompecabezas para ser armado y desarmado de acuerdo a la experiencia de cada lector (a). Perec fue hijo de judíos polacos- su padre murió en el campo de combate… su madre perdió la vida en Auschwitz. La vida del escritor francés fue corta pero intensa. Nació en París en 1938 y falleció en Val de Marne en 1982.
PERLA SCHWARTZ PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO
Fue un terrible cáncer el que se llevó la vida de uno de los más talentosos escritores galos del siglo XX.
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Su escritura se nutrió del existencialismo y la nouvelle roman. Escritura presidida por un tono sumamente festivo e irreverente, el ingenio y la ironía fueron el hilado fino, donde la felicidad permeó sus palabras.
En alguna entrevista Perec aseguró: “Mi primera preocupación reside en que no quiero escribir dos libros iguales. Para mí la literatura universal es como un rompecabezas…”
Otros de sus libros fueron: “Las cosas” (1965) y “Un hombre que duerme” (1970). Pero en definitiva “La vida, instrucciones de uso” fue su obra maestra, consta de poco más de 600 páginas, y dentro de ella hay todo un juego de espejos que abarca alrededor de 99 novelas.
El escenario es un edificio parisino el Simon Crubellier… cada fragmento parte de una familia, una persona o un objeto; otras se refieren a lo que sucede alrededor del edificio, la calle y sus ruidos; el tráfico de los autos: es una especie de obra de aventuras, un conjunto de historias sobresalientes que se entrecruzan.
Asimismo, esta novela que admite más de una lectura, es una profunda reflexión en torno a la naturaleza trágica y lúdica del creador... de los seres dispersos pero hipersensibles… entre líneas, Perec apunta certeramente que la misión del novelista es visibilizar la realidad que puede ser tonta pero al mismo tiempo llena de catástrofes cotidianas.
Para Paul Auster, Perec es de los pocos escritores contemporáneos entretenidos, como en su momento lo fueron Laurence Sterne o el popular Lewis Carroll.
Él le devolvió a la novela su naturaleza de artificio literario… es erudito pero no pretencioso. Dejó como legado un libro que lo podemos considerar a más de 3 décadas de su publicación paralela a aportaciones que han hecho los libros de ciencia ficción; el cine de autor que tuvo uno de sus puntos más altos en “La nueva Ola Francesa” en el cine que inició en los 50 del siglo pasado o en el pensamiento estructuralista con autores como Todorov.
“La vida como instrucciones de uso” es también una especie de “comedia humana” como la escrita por Balzac en el siglo XIX, o se embebe en novelas-río como la majestuosa “Ulises” (1922) de James Joyce el creador del monólogo interior.
En 1984, dos años después de su “muerte prematura” a Perec, viajero por la incandescencia del lenguaje, sucede que los astrónomos franceses descubrieron un nuevo y pequeño planeta, su número es el 2817 y se llama Georges Perec.
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