Enlace Judío México e Israel – Unas siete mil personas se congregaron en el Zócalo capitalino para culminar la Marcha de Gloria, organizada por la Iglesia Cristiana Evangélica, donde se bendijo a Israel, a su gobierno y a la ciudad de Jerusalén. Entre otras actividades relacionadas con el Estado de Israel, se entonó el Hatikva.

 

“El que bendice a Israel bendecido será”, dijo en la plancha del Zócalo el pastor Carlos Quiroa, ante unas siete mil personas que se habían congregado ahí después de marchar por el Paseo de la Reforma la tarde del sábado de Gloria, este 20 de abril, en la Ciudad de México.

Enlace Judío fue el encargado de presentar un segmento sobre Israel para los asistentes cristianos evangélicos, quienes después, guiados por el pastor Quiroa y dos pastores más, alzaron sus manos para bendecir a Israel, a su primer ministro, Benjamín Netanyahu y la ciudad de Jerusalén.

“Que Dios haga que nuestro país bendiga a Israel siempre”, dijo Quiroa antes de presentar a los pastores José Félix y Fernando Ruiz de la Rosa, quienes también dirigieron bendiciones para Israel. “Qué privilegio, que Dios nos permite bendecir al estado de Israel, a cada una de sus 12 tribus y, sobre todo, sus autoridades que están gobernando, recién electas”, dijo Ruiz de la Rosa.

En su turno, el pastor José Felix dirigió una efusiva bendición: “Señor, hoy oramos por la paz de Jerusalén y, Señor, que toda la nación sea bendita, y que tú la guardes en el hueco de tu mano, y que en esta nueva generación, Señor, en este nuevo gobierno, tú levantes, Señor, un vallado de protección. Ningún misil de ningún lugar podrá tocar la Niña de tus Ojos que es Jerusalén.”

Poco antes de que la terna evangélica dirigiera la prometida bendición, Enlace Judío presentó para el público un performance sobre la canción “Yerushalayim Shel Zahav” de Ofra Haza, en el que la bailarina Magali  Elena Flores hizo lo propio mientras un video de este portal de noticias mostraba imágenes de Jerusalén.

También se cantó el “Aleluya”, cuya letra fue proyectada en la pantalla gigante para que la gente que había asistido a la convocatoria de la Iglesia Cristiana Evangélica pudiera cantarla.

En un momento conmovedor, Giselle Arditti entonó a capella el himno nacional de Israel, el famoso Hatikva.

Antes de despedir a los representantes de Enlace Judío y de concluir la parte de la ceremonia que tenía como objeto bendecir a Israel, el pastor Quiroa pidió a los congregados que alzaran sus manos y las agitaran para saludar a Benjamín Netanyahu y a su gobierno para hacerles saber que “desde México tienen gente que les ama los 365 días del año.”

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