Diego Bolaños para Enlace Judío México e Israel- Paloma Woolrich primera actriz de teatro, cine y televisión y miembro de la Comunidad Judía de México e hija de la famosa pintora y muralista Fanny Rabel, tuvo una brillante intervención en la fiesta internacional de música y acción ambiental “Tierra Beat” que se llevó a cabo los días 27 Y 28 de abril en el parque Bicentenario de la CDMX.

El evento tuvo como objetivo crear conciencia sobre la importancia del cuidado del planeta y refrendar el compromiso con la sustentabilidad. En su primera edición, fue organizado por la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum, en conjunto del secretario de Cultura local, José Alonso Suárez del Real y Aguilera lo organizaron en su primera edición.

Con la participación de más de 34 bandas de reggae, rock y música electrónica, así como la realización de 90 actividades gratuitas (conciertos, teatro, cine, charlas, exposiciones y rodada ciclista), Tierra Beat, Fiesta Internacional de Música y Acción Ambiental se llevará a cabo en el Parque Bicentenario el sábado 27 y domingo 28 de abril, a partir de las 10:00 horas.

En la conferencia llamada “Hábitos de consumo, alimentación y huella ecológica”, la mesa de ponentes estuvo a cargo de Paloma Woolrich, primera actriz, Gabriela Vargas Romero de Cultiva Ciudad y el locutor de radio Gerardo Pimentel “Zopi” de Reactor 105.7. Más que una conferencia, fue una charla en donde el objetivo principal fue poder concientizar a las personas de la relación que se tiene actualmente con lo que comemos y con el ambiente en el que estamos viviendo.

Paloma hizo hincapié en que el producir nuestros propios alimentos es una muy buena opción, tanto por el tema de salud así como de la convivencia con la tierra.

Ella aconsejó experimentar y sembrar sus propias semillas; con algunos cuidados básicos garantiza que darán buenos resultados y que la experiencia de poder ver crecer los alimentos no tiene igual, y ya que estamos en un mundo inmerso de marketing y que ofrece productos los cuales son de tipo tóxico e inadecuados para la salud.

Debemos hacer mucha conciencia acerca de lo que comemos, pero sobre todo del desgaste del mundo, el cual nos cobrará la factura. Apegándose a los valores judíos, dejar el mundo mejor de lo que lo encontramos y pensar en las futuras generaciones.