Enlace Judío México e Israel – Tras una reunión de emergencia con sus aliados políticos, el primer ministro de Israel ha logrado conseguir un respaldo de 60 legisladores, sin mayoría absoluta ante el desacuerdo de Avigdor Lieberman.
En un comunicado del partido de Netanyahu, el Likud, se informó que “los jefes de las facciones políticas decidieron, por unanimidad, que se debe establecer, sin aplazamiento, un gobierno de derecha para que trabaje por el bien de todos los ciudadanos israelíes”.
La decisión vino como respuesta al estancamiento en las negociaciones que se presentó en estos días entre Netanyahu y sus aliados políticos, sobre todo a raíz de la disputa entre los partidos jaredíes y el partido Yisrael Beitenu de Lieberman, exministro de Defensa de Israel.
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Lieberman, cuyo partido cuenta con apenas 5 escaños en la Knéset, ha vacilado sobre su unión a un gobierno de Netanyahu ante su insistencia en que sea aprobada legislación que incremente el número de israelíes jaredíes en las FDI, y que se incluya un número específico de reclutamientos anuales, medida a la que los partidos Yahadut Hatorá y Shas, que cuentan con 16 escaños, se oponen.
Por ello, el Likud instó también a Lieberman, que declinó asistir a la reunión con el primer ministro, que deje al lado la confrontación y se una al gobierno, con lo que se lograría la mayoría absoluta del bloque de derecha.
“Los jefes de las facciones piden al presidente de Yisrael Beitenu, Avigdor Lieberman, que cumpla con su compromiso con sus electores y se una, sin demora, al gobierno de derecha, y que no de su mano al establecimiento de un gobierno de izquierda”.
En su respuesta, Yisrael Beitenu criticó la postura tomada por los aliados religiosos de Netanyahu y desestimó este nuevo posible gobierno formado.
“Todo lo que se necesita para establecer un gobierno de derecha es solicitar a los partidos jaredíes que acaben con su oposición a la ley de reclutamiento [de jóvenes religiosos a las FDI], tal y como se acordó en la pasada Knéset y como se aprobó en su primera lectura”, apuntó el partido en un comunicado.
“El gobierno de 60 [legisladores] no es un gobierno de derecha, sino un gobierno jaredí que en vez de proteger a Israel como un Estadio judío, lo convertirán en un Estado halájico. Por lo tanto, nos opondremos de manera firme al gobierno de 60”, concluyó.
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