Enlace Judío México e Israel – El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, reafirmó este fin de semana el apoyo incondicional de su régimen a la causa palestina por un sentido de obligaciones morales y humanitarias, informó el sitio Arutz Sheva.
Maduro hizo los comentarios este domingo durante una reunión con el ministro de Relaciones Exteriores de la Autoridad Palestina, Riyad Al-Maliki, en el marco de la reunión del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL).
El presidente venezolano destacó la necesidad de que Venezuela y los palestinos intensifiquen sus esfuerzos para enfrentar a la administración del gobierno de Donald Trump y sus políticas, que “contradicen los principios de las relaciones internacionales basadas en el respeto mutuo, el principio de no intervención en el ámbito interno los asuntos de los Estados y el principio de autodeterminación de los pueblos”, informó la agencia palestina Wafa.
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Por su parte, Al-Maliki informó a Maduro sobre los últimos desarrollos en el ámbito palestino y la acción internacional llevada a cabo por la Autoridad Palestina contra Israel, incluso en el ámbito de la Corte Penal Internacional, para enfrentar lo que él llamó “el intento norteamericano-israelí de liquidar la causa palestina imponiendo políticas de facto sobre el terreno y evitando el consenso internacional”.
Al tenor de la reunión del MNOAL, Maduro también sostuvo un encuentro con el canciller de Irán, Mohammad Javad Zarif, a quien le expresó su agradecimiento por su apoyo contra el “bloqueo internacional” en su contra.
Luego de la recepción del iraní el pasado viernes, su homólogo venezolano, Jorge Arreaza, expresó la intención de Venezuela de “aprender” de Irán a poder defenderse contra EE.UU.
En el pasado, Maduro ha expresado su apoyo a los palestinos y, en 2014, recibió a estudiantes palestinos en lo que se describió como un signo de la “condena del sionismo” en Venezuela.
El predecesor de Maduro, el fallecido Hugo Chávez, era conocido por sus críticas frecuentes contra Israel y en 2009, durante la Operación “Plomo Fundido” de las FDI contra Hamás en Gaza, dio fin a las relaciones diplomáticas entre Jerusalén y Caracas, y expulsó al embajador israelí de Venezuela.
Maduro, quien asumió el poder después de la muerte de Chávez, fue uno de varios líderes latinoamericanos que criticaron la Operación “Borde Protector” de las FDI sobre Gaza en 2014.
Al mismo tiempo, negó ser antisemita y subrayó que, si bien su país tiene diferencias con Israel, esas diferencias no tienen nada que ver con el pueblo judío.
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